Expertos de Uruguay señalan a los patrulleros chinos como la mejor opción para la Armada

Tras poco más de un mes de análisis, las diversas comisiones asesoras designadas por el Gobierno de Uruguay, con el fin de evaluar las tres ofertas presentadas para la provisión de dos patrulleros oceánicos para la Armada, han señalado que la propuesta de la empresa china CSTC es la idónea para el país dado que cumple con todos los requisitos solicitados.

Esta decisión es la culminación de una búsqueda que comenzó hace casi ocho años atrás, con múltiples llamados y competencias y para la que el nuevo gobierno optó por realizar una compra directa por excepción, realizando un llamado abierto a todos los astilleros que quisiesen presentarse y proveyendo una lista de requerimientos que serian ponderados por varias comisiones, incluyendo una técnica de la Armada, una financiera y otro de seguimiento. 

Después de concluido el proceso de recepción de ofertas, únicamente tres astilleros cumplieron en forma la presentación de las mismas, siendo estos el francés Kership, el neerlandés Damen y el chino China Shipbuilding Trading Co. (CSTC).

Damen, como era esperado, presentó con una versión del OPV 1800 similar a la clase Tun Fatimah malaya, mientras que, en primera instancia, se asumía que el astillero francés y el chino repetirían las ofertas realizadas en los procesos anteriores, con el OPV 90 y el P18N , respectivamente, pero esto no fue lo que finalmente sucedió. 

En el caso de Kership se presentó una opción distinta a la adquirida por Argentina en 2018 bajo un contrato de 319 millones de euros por cuatro unidades incluyendo tres nuevas y una de segunda mano botada en 2011, lo que indudablemente pondría al modelo original francés muy por encima del presupuesto manejado por Uruguay. La unidad ofertada, de menores prestaciones que la OPV 90, no cumpliría con muchos de los requerimientos técnicos solicitados en el pliego de condiciones más allá de ser la propuesta financiera más económica de las tres.

La mejor oferta según los expertos 

Con relación a China, en vez de ir por el P18N de 1.700 toneladas de desplazamiento y 95 metros de eslora, esta vez se optó por tomar como base un buque más grande, con dimensiones más cercanas a las de una fragata, con más de 100 metros de eslora, 2.250 toneladas de desplazamiento y 8.500 millas náuticas de autonomía. 

El costo de adquisición es de 139,98 millones de dólares por los dos barcos con su armamento, munición y listos para zarpar desde China. A esto hay que agregarle el costo del soporte logístico integrado del que la Armada pide por lo menos cinco años, a un costo de seis millones de dólares por buque, lo que llevaría el la inversión total a 151,98 millones de dólares por ambos navíos. China además ofrece el mantenimiento y actualización del software de los buques por 20 años sin costos adicionales.

Opcionalmente, se ofrece la extensión del soporte logístico integrado por otros 10 años, a un costo total de 38 millones de dólares adicionales por ambos barcos como así también la instalación de sistemas de comunicacion y data link occidentales provistos por Thales, en vez de chinos como está en la oferta base, por otros 9,5 millones de dólares. 

Si se optara por esta última opción -el soporte logístico integrado a 15 años y los sistemas de Thales- esto llevaría la oferta China a un máximo de 199,48 millones de dólares y aún así quedaría por debajo de la propuesta de Damen, que se sitúa en 225 millones de dólares y que no incluiría la opción de extender el soporte logístico por más de cinco años. Si se comparan las ofertas con el mismo tiempo de soporte logistico (un lustro), mantenimiento de software por 20 años y equipamiento de comunicaciones occidental, la oferta China queda a 161,48 millones de dólares contra los 225 millones del astillero neerlandés.

El proceso de selección contó con la aprobación de todos los miembros de las comisiones asesoras, tanto en la parte técnica como en el asesoramiento financiero y la comisión de seguimiento. A partir de ahora el proceso pasa al gobierno para que políticamente se decida cuáles serán los siguientes pasos a tomar.