El Comité de Empresa de Nissan asegura que el proyecto para crear un centro de mantenimiento de vehículos del Ejército de Tierra en Barcelona sigue encima de la mesa, a pesar de la oposición frontal de la Generalitat a esta opción.
El pasado viernes, el conseller de Empresa, Roger Torrent, rechazó una vez más el proyecto para reparar blindados en las instalaciones ubicadas en el polígono de la Zona Franca, que el gigante automovilístico dejará el próximo 1 de enero. Desde el Govern, descartan esta posibilidad por razones éticas y también por cuestiones técnicas y de plazos.
No obstante, los sindicatos creen que la Generalitat no ha estudiado suficientemente la propuesta, promovida hace unas semanas por el Ministerio de Industria, para instalar una planta de reparación de vehículos de cadenas y de ruedas del Ejército de Tierra, gestionada por Tess Defence, la compañía formada por Santa Bárbara Sistemas, Indra, Sapa Placencia y Escribano, que lidera el programa VCR 8x8 Dragón.
El presidente del Comité de Empresa de Nissan, Juan Carlos Vicente, ha anunciado que los trabajadores plantearán de nuevo esta opción en la próxima reunión de la mesa de reindustrialización, compuesta por representantes de Generalitat, Gobierno central (Industria) y agentes sociales. En la mesa se están debatiendo las diferentes alternativas que existen para dar uso las instalaciones que deja Nissan a partir del 1 de enero. También está en el aire el futuro de unos 1.400 trabajadores.
Vicente solicitó además el apoyo del secretario de Estado de Industria, Raúl Blanco, que en un primer momento apostó por el proyecto militar. “Todo está encima de la mesa. Si no traen este proyecto (en referencia a Tess Defence), tendrán que poner otro encima de la mesa. A Raúl Blanco le estamos presionando porque pese a que a la Generalitat diga que no, hay 600 puestos de trabajo en juego”, señala Vicente, según recoge La Razón. En esta línea, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, pidió la semana pasada en una entrevista en RTVE a la Generalitat que valorara de nuevo la el proyecto militar para la Zona Franca y le acusó de no quererlo por una cuestión ideológica y no práctica.
La realidad es que, a nivel institucional, más allá de Industria, el proyecto no ha sumado ningún apoyo, al menos públicamente. El Ministerio de Defensa ya dejó claro a principios de diciembre que la futura base logística del Ejército de Tierra en Córdoba es la única opción que contempla para el mantenimiento de los blindados y carros de combate del Ejército.
La propuesta, cabe recordar, señalaba que el centro de mantenimiento de blindados ocuparía unos 150.000 metros cuadrados de la planta –que tiene 500.000 metros cuadrados- y generaría unos 300 puestos de trabajo, pudiendo acoger más de 1.400 vehículos, entre carros de combate, blindados de cadenas y vehículos de combate sobre ruedas.