El Covid-19 paraliza las misiones de cooperación con países de África occidental

La crisis del coronavirus ha provocado la suspensión de las actividades de seguridad cooperativa de las Fuerzas Armadas españolas con los países de África Occidental. Este tipo de actividades, están divididas en dos, por un lado, los adiestramientos en capacidades específicas a Túnez, Mauritania, Senegal y Cabo Verde, y, por otro, el despliegue periódico de un buque de la Armada para realizar misiones de seguridad marítima y diplomacia de defensa con los países ribereños del golfo de Guinea.

El capitán de navío Juan Alberto Cartelle, jefe de Operaciones Actuales del Mando de Operaciones (Mops) explicó este jueves que este tipo de despliegues han sido las más afectados por el Covid-19, en un seminario web sobre la operación Balmis, organizado por IDS Connect.

El representante del Ministerio de Defensa detalló que la reducción de la actividad en las fuerzas armadas locales, a raíz de la pandemia, "ha obligado a cancelar las actividades de seguridad cooperativa" y a reducir los contingentes en otras misiones enfocadas al adiestramiento, asesoramiento y formación como Mali, Somalia, República Centroafricana, Irak y Afganistán.

Cartelle resaltó que los "contingentes están listos y preparados en España para desplegar de nuevo en caso necesario o una vez que las condiciones lo permitan". Otras operaciones, como las de Turquía, Letonia o la Policía Aérea del Báltico, han continuado desarrollando sus cometidos "sin novedad".

Preparación de relevos

En líneas generales, comentó, las operaciones en el exterior han mantenido "un nivel satisfactorio". Sin embargo, la irrupción del coronavirus ha tenido un impacto considerable en la generación de los contingentes. "Mayo es un mes clásico en los relevos de algunos de ellos numerosos Líbano, Irak, Mali o Yibuti, lo que ha hecho necesario establecer unas medidas mitigadoras para no transportar al exterior los casos de Covid-19", aseguró el capitán de navío.

El procedimiento "riguroso" para el personal antes del despliegue ha sido el siguiente: "test, cuarentena, test, PCR, cuarentena y PCR". A esto hay que sumar, concretó Cartelle, "la correspondiente cuarentena en zona de operaciones siempre y cuando las autoridades del país en que desplegamos lo obliguen".

Defensa también ha impuesto medidas específicas para las tripulaciones de los aviones que efectúan los despliegues y activo en zona de operaciones "un procedimiento para la actuación en enfermedades de transmisión por vía aérea o por contacto de alto impacto", que implica un seguimiento específico del coronavirus en el país del despliegue, así como reforzar el material de protección para el personal destacado.

Operaciones Permanentes

El capitán de navío también recordó que, además de la operación Balmis contra el coronavirus y las misiones internacionales, el ministerio mantiene operaciones permanentes en territorio nacional en los ámbitos terrestre, marítimo, aéreo y en el ciberespacio, centradas en el conocimiento y vigilancia del entorno para "actuar en caso de necesidad" y en las que trabajan unos 1.200 militares.

En este sentido, a modo de conclusión, Cartelle quiso lanzar un mensaje. "Aún con la operación Balmis en marcha estamos preparados para reaccionar cuando sea necesario".