Aviación Naval de Chile, capacidades polivalentes en la lucha contra el Covid-19

La Aviación Naval de la Armada de Chile ha desplegado sus capacidades técnicas y humanas una vez más al servicio del país para enfrentar la peor crisis sanitaria que enfrenta el territorio nacional en un siglo.

Como publicó Infodefensa.com, a contar de la medianoche del jueves 19 de marzo entró en vigencia el Estado de Excepción Constitucional de Catátrofe por Calamidad Pública para evitar que la pandemia del Covid-19 siga expandiéndose en las 16 regiones del país.

La Aviación Naval ha empleado desde aquella fecha sus aeronaves en labores de transporte logístico, traslado de personal y entrega de insumos médicos a lo largo del territorio de Chile sin descuidar las misiones de exploración y vigilancia en la Zona Ecónomica Exclusiva (ZEE) y las tareas de búsqueda y salvamento en el territorio marítimo.

Como parte del esfuerzo institucional, la Aviación Naval ha efectuado diversas misiones aéreas con helicópteros Airbus AS365 Dauphin (HH-65) y Bo-105 (UH-05) además de aviones de exploración aeromarítima C295 Persuader (P295) desde la base aeronaval Concón, Grupo Aeronaval Norte de Iquique, Grupo Aeronaval Talcahuano, Grupo Aeronaval Puerto Montt y Grupo Aeronaval Sur de Punta Arenas.

Esta Fuerza Operativa ha extremado además las medidas de autocuidado entregando a los aviadores navales diferentes elementos de protección personal para evitar contagios por coronavirus. Esto ha permitido la continuidad de las necesarias labores de mantenimiento del material de vuelo en la infraestructura terrestre y de apoyo de la Aviación Naval.

Operaciones aéreas

Una de las primeras operaciones destacadas de la Aviación Naval fue el traslado de insumos médicos desde la base aeronaval Concón al aeródromo Róbinson Crusoe del archipiélago de Juan Fernández a finales de marzo.

La institución envió un avión de vigilancia costera Vulcanair Aircraft P68 Observer 2 con 400 vacunas contra la influenza para apoyar a la población de riesgo y evitar que se contagien con esta enfermedad respiratoria.

Cabe destacar que la Aviación Naval dispone de siete P68 Observer 2 adquiridos en septiembre de 2015 por un monto estimado de 13,6 millones de dólares. El proyecto, denominado Piquero, permitó reemplazar a los aviones de búsqueda y patrullaje costero Cessna O-2A Skymaster que cumplieron su vida útil tras prestar servicios en la institución desde fines de la década de 1990.

El Grupo Aeronaval Sur desplegó un helicóptero AS365 F1 Dauphin a mediados de abril para trasladar muestras de PCR tomadas a ocho casos sospechosos de Covid-19 en la localidad de Puerto Edén, Región de Magallanes.

La aeronave se reunió en un punto de encuentro con el patrullero océanico OPV-83 Marinero Fuentealba de la Tercera Zona Naval para recoger y trasladar los exámenes al laboratorio del CADI de la Universidad de Magallanes en Punta Arenas.

El AS365 F1 Dauphin fue habilitado con medidas de protección especiales, aislando la cabina y tomando protocolos de sanitización previas y posteriores al operativo de transporte de las muestras de PCR.

Valparaíso y Biobío

El material de vuelo de la Aviación Naval ha sido utilizado en tareas de vigilancia y transporte por los jefes de la Defensa Nacional (Jedena) en la Región de Valparaíso, contraalmirante Yerko Marcic, y región del Biobío, contraalmirante Carlos Huber.

El Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe busca garantizar el correcto funcionamiento de la cadena logística y trasporte de insumos médicos como también la seguridad de hospitales, centros de atención de salud e infraestructura crítica de servicios básicos. Asimismo las Fuerzas Armadas colaboran en el resguardo de la frontera terrestre, marítima y aérea y apoyan a las policías en la protección del orden público.

Las autoridades navales asumieron el mando de las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad Pública que se encontraban en la zona declarada en estado de catástrofe, para los efectos de velar por el orden público y de reparar o precaver el daño o peligro para la seguridad nacional que representa el coronavirus.

Los efectivos militares y policiales a su cargo han desarollado en las últimas semanas patrullajes preventivos, puestos de control nocturnos y resguardo de instalaciones críticas como hospitales y supermercados para otorgar orden y seguridad a la población civil de cada región y contribuir a un mejor manejo de la emergencia que vive el país.

Fiscalización oceánica y entrenamiento

Un avión de exploración aeromarítima Airbus C295 Persuader del Escuadrón de Exploración Aeromarítima VP-1 realizó en este período una Operación de Fiscalización Pesquera Oceánica en el área de las islas Desventuradas.

Esta misión se desarrolló en la Zona Económica Exclusiva de jurisdicción de la Cuarta Zona Naval con el fin de vigilar el cumplimiento de los acuerdos internacionales suscritos por el Estado de Chile tendientes a controlar flotas pesqueras no declaradas que realizan pesca ilegal y explotan las especies migratorias afectando su reproducción.

La Aviación Naval dispone de tres P295 Persuader que fueron adquiridos para potenciar la exploración aeromarítima estratégica y táctica en apoyo a las fuerzas navales y de los teatros de operaciones, mejorar la vigilancia de los espacios marítimos de responsabilidad nacional y optimizar las capacidades de transporte militar aéreo.

En este operativo la Aviación Naval desplegó además un helicópero de ataque Airbus AS332 F1 Cougar del Escuadrón HA-1 que interoperó con la fragata antisubmarina Type 23 FF-05 Almirante Cochrane de la Escuadra Nacional para marcar presencia y resguardar los intereses marítimos del país.

El AS365 Dauphin F1 del Grupo Aeronaval Talcahuano entregó apoyó al patrullero oceánico OPV-81 Piloto Pardo en el despliegue logístico y el relevo de carabineros en la isla Mocha. La aeronave efectuó también el reaprovisionamiento de víveres, combustible y material de construcción en el faro emplazado en esa parte del país.

El helicóptero del Grupo Aeronaval Talcahuano efectuó además actividades de entrenamiento con los nadadores de rescate de las jurisdicciones de Valdivia y Talcahuano. La unidad permitió al personal de la Autoridad Marítima preparar y perfeccionar sus capacidades operativas para enfrentar emergencias en el mar.