Varsovia ha encargado a un consorcio de empresas liderado por la firma local PGZ (Polska Grupa Zbrojeniowa) la construcción de tres fragatas costeras, que deberán estar listas en 2034. El valor estimado de este programa denominado Miecznik, que deberá estar concluido en 2034, es de 8.000 zloties, lo que equivale a 1.770 millones de euros al cambio actual.
Polonia inició el pasado marzo el procedimiento de adquisición de estos buques, cuyo encargo ya anunció en 2012. Finalmente, el lanzamiento efectivo del programa, plasmado con este encargo, tuvo lugar este agosto. El proyecto conlleva además la suscripción de un contrato de transferencia de tecnología (ToT, por las siglas de este concepto en inglés), al que optan la firma española Navantia, con su modelo de fragata F-100; la británica Babcock, que se presenta con el buque Arrowhead 140, y la alemana Thyssenkrupp Marine Systems (TKMS), con su buque Meko A200/A300. El programa Miecznik forma parte del plan del Gobierno polaco para modernizar sus Fuerzas Armadas, un plan que tendrá una inversión de 115.000 millones de euros hasta 2035. A él también optaban, además de Navantia, Babcock y TMS, las firmas semipúblicas francesa DCNS e italiana Leonardo.
El consorcio encargado de este desarrollo, del que forman parte los constructores navales PGZ SW y Remontowa, debe preparar tres diseños a partir de los tres posibles socios extranjeros, acordes con los requisitos polacos para el mes de noviembre. A continuación, según recoge el medio especializado local Defence 24, la Inspección de Armamento polaca deberá elegir la oferta más competitiva en el primer trimestre de 2022. En ese momento, el consorcio trabajará para finalizarlo según los requisitos solicitados de la Armada polaca.
El primero de los tres buques, que se construirán en suelo polaco, deberá lanzarse dentro de los cuatro años posteriores a la finalización del diseño ganador, y programa deberá estar concluido para 2034.
La fuente apunta que cada barco, que deberá estar preparado para completar misiones de combate contra objetivos en el mar, en el cielo y en tierra, desplazará más de 2.000 toneladas y contará con modernos sensores, sistemas de armas y un sistema de combate integrado.