DCNS ha sido una de las empresas participantes este año en la feria chilena Exponaval, a la que ha llevado toda su oferta de buques con el objetivo de ampliar su presencia en un mercado, el latinoamericano, por el que la compañía apuesta fuertemente. Bajo la premisa de "estamos dispuestos a ayudar", el grupo francés ha puesto su tecnología a disposición de la industria local latinoamericana para el desarrollo conjunto de las capacidades necesarias para que sean los astilleros nacionales los que desarrollen sus propios productos bajo la tutela de DCNS.
"Nuestro éxito como empresa de tecnología avanzada con alcance global se basa en satisfacer las necesidades de los clientes mediante el despliegue de un know-how excepcional, recursos industriales únicos y la capacidad de desarrollar asociaciones estratégicas innovadoras", explican desde la compañía.
Aunque las cifras totales en este tipo de eventos siempre son confidenciales, cualquier visitante podía comprobar de un solo vistazo que DCNS fue una de las empresas más visitadas por las delegaciones presentes (en la foto el ministro de Defensa de Chile, José Antonio Gómez). La empresa es sobradamente conocida en la región donde, por ejemplo, firmó un contrato con la marina brasileña en 2009, que incluye la transferencia de tecnología para la construcción de cuatro submarinos de clase Scorpene. Aparte de esto, en Chile, DCNS ha vendido dos submarinos de clase Scorpene a la Armada, incluyendo también la transferencia de tecnología, y participa en la mejora de los submarinos de clase 209.
El abanico de posibilidades que ofrece DCNS a América Latina va desde una sencilla patrullera hasta un portaaviones pasando por todo tipo de corbetas, fragatas o submarinos. Para Latinoamérica, el gran atractivo de esta empresa, y lo que la ha llevado a estar incluida siempre en los grandes programas navales de la región como una de las candidatas principales, es su capacidad de transferencia tecnológica.
En DCNS lo tienen claro, "la región tiene como objetivo desarrollar sus astilleros y flotas de defensa naval, pretenden así aumentar sus capacidades y fomentar el empleo y no solo hablamos de satisfacer las necesidades del mercado nacional, sino de la exportación". Una misión que DCNS está dispuesta a ayudar a cumplir: "Lo que proponemos son soluciones adaptadas a las necesidades específica de un país incluyendo, cómo no, las transferencias tecnológicas, desde la construcción hasta el mantenimiento de buques y submarinos, incluyendo la concepción y construcción de astilleros e infraestructuras y una gama completa de servicios a bases navales y astilleros"
Un catálogo completo para Exponaval
Entre los productos que DCNS ha presentado en Exponaval destaca su buque de nueva generación Belharra, una fragata de 4.000 toneladas de gran armamento. Con Belharra, DCNS responde a las expectativas de las marinas latinoamericanas en busca de una fragata compacta, capaz de realizar misiones de largo alcance, operando solas o integradas en una fuerza naval, en alta mar. En el área de los submarinos, DCNS propone el submarino de clase Scorpene, diseñado para cumplir todo tipo de misiones y totalmente adaptado para operar teniendo en cuenta las diversas condiciones operacionales y ambientales de las aguas latinoamericanas. El tercer producto es la Gowind 2500, la nueva generación de buques de combate de superficie, robustos y bien equipados, tanto en términos de electrónica, armas y capacidades de proyección, con gran capacidad en la guerra antisubmarina. La estrella de esta clase es el OPV 90 clase Adroit, un buque de patrulla offshore. El OPV 90 es un barco fácil de operar y fácil de mantener.
Foto: DCNS