Las Empresas de Defensa de Chile desarrollarán la innovación y tecnología en Magallanes

El Ministerio de Defensa Nacional de Chile y la Universidad de Magallanes (Umag) firmaron un convenio marco en el ámbito de la cooperación para el desarrollo de investigación, el desarrollo científico, tecnológico y de innovación en la Región de Magallanes y Antártica Chilena.

A la ceremonia online, realizada el 8 de julio, asistió el rector de la Umag, Juan Oyarzo; el subsecretario de Defensa Nacional, Cristián de la Maza; y los directores ejecutivos de las Empresas Estratégicas de Defensa (EED) Famae, Asmar y Enaer.

En la instancia se destacó esta iniciativa conjunta ya que se trata de una alianza en la que se podrán integrar las capacidades científicas y técnicas que tienen las dos instituciones estatales, para contribuir con el desarrollo del territorio austral y su área de Defensa, una zona calificada como estratégica desde el punto de vista de la I+D+I.

De esta forma, en el documento del convenio se estableció realizar un intercambio voluntario de información técnica y estadística, en el ámbito científico y tecnológico, cuando esto no afecte el deber del secreto o reserva en el ámbito de la Defensa; fomentar la integración colaborativa, poniendo énfasis en la realización de capacitaciones, seminarios, intercambio de docentes y alumnos, prácticas profesionales, publicaciones científicas, participación en proyectos de investigación, desarrollo e innovación, entre otros, -integración que procurará generar vínculos de cooperación entre la Universidad, el Ministerio y sus organismos relacionados-; ypor último, otorgar facilidades para participar en cursos, diplomados y realización de estudios de postgrado en general.

El rector Oyarzo señaló que: “Nos complace firmar este convenio hoy con un organismo de nuestra misma naturaleza estatal que nos unirá en acciones conjuntas con la Subsecretaría a cargo de proponer y coordinar las políticas sectoriales para el desarrollo científico, tecnológico e industrial de la Defensa Nacional y evaluar los proyectos de desarrollo e inversión que de ellas se deriven. Sin duda, se tratan de funciones interesantes para nuestra Universidad pues se relacionan estrechamente con nuestro rol como institución facilitadora del enriquecimiento integral de una región tan estratégica en términos de Defensa como Magallanes”.

En tanto, el subsecretario de la Maza dijo que “este desafío en investigación, desarrollo e innovación tecnológica para la Defensa requiere, precisamente, integrar a científicos, técnicos, universidades y centros de investigación nacional porque se trata de generar una masa crítica altamente especializada, capacitada, que genere externalidades positivas sobre la economía, sobre el empleo, sobre el desarrollo científico-tecnológico, la independencia, en algunos casos, de proveedores externos y también la generación de buenas políticas públicas que, claramente, deben estar sustentadas en el conocimiento”.

Agregó que “en ese marco destacamos a la Universidad de Magallanes que proyecta su accionar docente y de investigación científica en la Antártica con una importante línea de investigación que abarca el estudio de ecosistemas terrestres y marinos, y ciencias de la tierra en la ecorregión subantártica de Magallanes y el continente antártico. Y esto constituye otra instancia de trabajo integrado para la Defensa que es factible de desarrollar y declaramos nuestra mejor voluntad para hacerlo”.

Según el subsecretario, entre las áreas a desarrollar, y que forman parte de la Política de Defensa en esta dirección, están la robótica, inteligencia artificial, análisis de datos, vehículos no tripulados, nanotecnología, tecnología de materiales, biología e, incluso, ciencias sociales. También dijo que, a futuro, podrán generarse proyectos de investigación en torno al Sistema Nacional Satelital al que se incorporó Magallanes, siendo una de la zonas del país donde se construirá una estación de monitoreo para la generación de servicios espaciales.

Acotó que las Empresas Estratégicas de Defensa tienen un rol no solo para el sostenimiento logístico-integral de los sistemas de las Fuerzas Armadas, sino también para contribuir a la investigación, a la innovación, al desarrolllo y producción de equipamiento con uso dual, civil o militar.