El Ejército de Uruguay se deshace de sus Defender a cambio de camiones

El Ejército Nacional de Uruguay ha incluido unos 54 Land Rover Defender como unidades a ser entregadas como permuta para la adquisición de camiones, camionetas y ómnibus.

La inclusión de estos vehículos, que apenas tienen un lustro y poco de uso en la fuerza, llama poderosamente la atención, sobre todo las 22 unidades del modelo táctico, que vinieron a cumplir un rol clave en la vigilancia fronteriza y le permiten a los distintos batallones y regimientos tener un vehículo ligero de exploración con una buena capacidad de armamento y movilidad todo terreno, sin que se estén reemplazando por algo similar, sino por material básicamente administrativo.

La compra para la que se ofrecen los Land Rovers es por 15 camiones doble cabina con capacidad de carga de por lo menos 1.5 toneladas, 15 camiones utilitarios de cabina simple con la misma capacidad de carga, 15 camionetas doble cabina del tipo pick-up 4x4 con capacidad de carga de 800kg o más, 15 camionetas del mismo tipo pero 4x2, 12 automóviles sedan cuatro puertas, 30 ómnibus para 12 pasajeros como mínimo, tres ómnibus para tres pasajeros como mínimo y un furgón de carga.

En la oferta para la permuta, junto con los Land Rover Defender, se incluyen camiones Ural, camionetas DAF, camiones Mercedes Benz, unidades chinas JMC, Great Wall, Foton, un Tatra 8x8 entre otros, totalizando un valor estimado de 733.300 dólares tasados por un rematador público.

Esta compra de material de transporte podría responder a varios elementos. Uno de ellos podría ser un proyecto para que las distintas unidades militares tengan vehículos de transporte propios para despliegues de efectivos puntuales en vez de depender del centralizado Servicio de Transporte del Ejército. También existe una propuesta legislativa, denominada Vivir Sin Miedo, que abriría el espacio para la participación de las Fuerzas Armadas en el orden interno en todo el territorio nacional con la creación de una Guardia Nacional. De todas maneras, queda por verse si las unidades que pierden sus vehículos tácticos recuperán esas capacidades a través de otro tipo de material o sencillamente dejarán de contar con ellos.