La flota de helicópteros Super Puma, versión SAR AS332C1e, del 802 Escuadrón de Fuerzas Aéreas, perteneciente al Ala 46 del Ejército del Aire, ha alcanzado las 2.000 horas de vuelo. Las aeronaves, que operan desde la base de Gando (Gran Canaria), están dedicadas a operaciones de búsqueda y rescate (SAR) en el área del archipiélago canario.
Esta base ha recibido en los últimos años cuatro nuevos Super Puma, adquiridos por la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) para cubrir las bajas producidas en accidentes en aguas de Canarias y en Afganistán, que dejaron una decena de muertes y en los que se perdieron cuatro helicópteros.
El primer helicóptero Super Puma en la configuración SAR AS332C1e fue adquirido en 2016 y recibido en noviembre de ese mismo año. En septiembre de 2017, el Ministerio de Defensa contrató otros dos helicópteros que llegaron en noviembre de 2017 y febrero de 2018, respectivamente. El último aparato fue entregado en marzo de 2019. Las cuatro aeronaves fueron adaptadas a los requisitos de la Fuerza Aérea en la planta de Airbus Helicopters en Albacete.
Todo el proyecto fue gestionado a través de la oficina del programa SAR/CSAR dependiente de la jefatura de Sistemas de Aéreos de Ala Rotatoria de la Subdirección General de Gestión de Programas de la DGAM. El programa, además de la compra de los helicópteros, recoge el paquete de documentación técnica y los repuestos que garantizan el sostenimiento de los cuatro Super Puma durante al menos dos años, coincidiendo con el periodo de garantía.
En el Ala 46 también operan otros dos sistemas de armas, el caza de combate F-18 y el avión de transporte CN235. El Ejército del Aire remarca que la unidad "trabaja 24 horas los 365 días del año, de forma coordinada y en equipo, con sus tres sistemas de armas, con el fin de garantizar la defensa aérea de España y de apoyar en lo que sea necesario a la acción del Estado".
Y añade: "La implicación del Grupo de Material del Ala 46 y, en particular, del Grupo 82, cuyo escuadrón de Mantenimiento y tripulaciones de vuelo demuestran día a día su profesionalidad, hacen posible esta gran labor. También es partícipe de ello todo el personal de la base aérea de Gando, cuyo espíritu de servicio mantiene las instalaciones y los servicios comunes a punto para que todo ello sea posible. Así como el Mando de Apoyo Logístico (Malog) ha sido capaz de poner en funcionamiento un nuevo sistema de armas".