El Ejército del Aire se ha incorporado este viernes al proyecto del Futuro Sistema Aéreo de Combate (FCAS). El Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, general del aire Javier Salto Martínez-Avial, por parte del Ministerio de Defensa, y el jefe de Estado Mayor del Armée de l’air francesa, general Phillippe Lavigne, han firmado el conocido como Documento de Requisitos Operacionales de Alto Nivel (Hlcord).
De esta forma, la Fuerza Aérea pasa a formar parte del desarrollo y obtención de un sistema de armas de nueva generación (NGWS), el FCAS. El diseño del avión de combate lo iniciaron en el año pasado los ministerios de Defensa de la República Federal de Alemania y de la República Francesa.
El Ejército del Aire resalta que es un programa de "máxima importancia" que garantiza el reemplazo de su flota actual de Eurofighter por un sustituto que incorpore los avances tecnológicos necesarios para garantizar la superioridad en el entorno del año 2040.
En un reciente artículo en la revista RED, el Ministerio de Defensa explica que está previsto que el proyecto pueda optar a ayudas de la Unión Europea a través del Fondo de Defensa Europeo, que puede financiar hasta la fase de prototipos industriales.
Francia y Alemania ya han lanzado un estudio de concepto conjunto (JCS, por sus siglas en inglés) del futuro sistema aéreo de combate. Dassault Aviation y Airbus, las empresas adjudicatarias del contrato, serán las encargadas de realizar este estudio que se prolongará dos años.
Demostrador en 2025
Ambas empresas detallaron en un comunicado que dicho estudio "sentará las bases para el diseño y la industrialización, así como para establecer una capacidad operativa completa y preparar y poner en marcha diferentes programas de demostradores". Por su parte, el secretario de Estado de Defensa, Ángel Olivares, afirmó tras la firma en Bruselas de la incorporación de España al proyecto que en el mes de junio se prevé fijar los requisitos operativos y el porcentaje de participación de cada uno de los países.
El número dos de Defensa señaló también que es "prematuro" aventurar costes o números de plataformas que se encargarán, pero sí avanzó que, en torno a 2025, se espera contar ya con unos demostradores tecnológicos que permitan seguir avanzando en el desarrollo.