El plan Rearmar Europa, presentado el martes por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, fue el preámbulo del encuentro que este jueves ha reunido en Bruselas a los líderes de los 27 países de la Unión Europea (UE) y Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, el país cuyo ataque de Rusia hace poco más de tres años ha movido el avispero europeo. El despertar de la defensa del viejo continente, dormida durante décadas bajo la seguridad que le ha proporcionado el aliado Estados Unidos (ahora en su punto más alejado en 80 años), toma ahora forma a pasos agigantados. El nuevo enfoque ya tiene una cifra inicial: 800.000 millones de euros. Esa es la cantidad que la UE aspira a movilizar en un plazo concreto, cuatro años. También ha trascendido algo más del modo en que se obtendrá, que pasará casi en un 80% por los presupuestos de defensa de los países miembros, mientras que 150.000 millones se extraerán de deuda común.
Este es el punto de partida acordado, al que seguirán fórmulas previstas como el uso de los fondos de cohesión (diseñados para equilibrar las cuentas de las distintas regiones de la UE) con un enfoque de reforzamiento militar, y, principalmente, el desarrollo de un gran capitulo de defensa en los presupuestos plurianuales de la Unión, cuyo próximo periodo arrancará en 2028 y durará hasta 2034.
Para facilitar el nuevo enfoque, se ha previsto que durante cuatro años los dineros dedicados a inversión en defensa no figuren como deuda en el pacto de estabilidad de la UE que limita el exceso de déficit de sus miembros, e incluso algunos países, como Alemania, han pedido alargar sin plazo ese periodo para continuar recurriendo a créditos para hacer frente al incremento de los gastos militares.
Más propuestas en dos semanas
De momento, ya está previsto que la Comisión Europea presente en dos semanas nuevas propuestas para incrementar las partidas y acelerar las inversiones en defensa, de cara a una próxima cumbre.
“Europa se enfrenta a un peligro claro e inmediato a una escala que ninguno hemos experimentado en nuestra vida adulta”, ha dicho Von der Leyen a los líderes de los países miembros, que se han mostrado unánimemente de acuerdo en emprender este camino de fortalecimiento de la seguridad europea.
Alianza con Londres
Donde no ha sido posible alcanzar el beneplácito de todos ha sido en el compromiso de ayuda militar a Ucrania, donde la Hungría encabezada por su primer ministro, Víktor Orbán, ha ejercido de verso suelto. En todo caso, aunque no sea posible de este modo la postura unánime necesaria para tomar medidas comunes, los 26 miembros restantes han convenido en seguir respaldando los esfuerzos de Kiev frente a Moscú más allá de la vía de la UE cerrada por Orbán.
Son nuevos tiempos con nuevos desafíos a los que Europa no quiere dar la espalda. “Estamos dispuestos a invertir en defensa mejor, más rápido y juntos”, ha apuntado Von der Leyen, y seguidamente ha citado a Londres dentro de esta ecuación. Entre tanto, Europa trata de alejarse de la dependencia militar de Estados Unidos.
"Ámbitos prioritarios"
En el encuentro de este jueves en Bruselas se ha acordado una serie de "ámbitos prioritarios" precisados de especial atención en defensa, entre los que figuran la defensa antiaérea, la artillería, misiles, munción en general, sistemas de drones y contradrones, movilidad militar, protección de infraestructuras y recursos en ciberdefensa, inteligencia artificial y guerra electrónica, entre otros.