El nuevo gobierno laborista británico se compromete a elevar el gasto militar al 2,5%

El nuevo primer ministro británico, el laborista Keir Starmer, se ha comprometido a dedicar el 2,5% del PIB (Producto Interior Bruto) del país a su defensa. Con esta medida, el Gobierno que salió de las urnas la semana pasada, llega a su primera cumbre de la OTAN, que comenzó el martes y concluye hoy en Washington. Starmer ha llegado a este encuentro con el objetivo de enfatizar su determinación de enfrentar las amenazas globales a Gran Bretaña y sus aliados occidentales. El primer ministro ha elogiado los esfuerzos de los miembros de la organización por aumentar el gasto en defensa, al tiempo que ha apuntado hacia mayores aumentos del gasto para ayudar a la Alianza a abordar la naturaleza de las amenazas actuales.

El líder británico ha confirmado que la próxima semana pondrá en marcha la Revisión Estratégica de la Defensa del Gobierno, con un trabajo preparatorio detallado ya realizado por el secretario de Defensa, John Healey, que se encargará de supervisar la revisión.

Esta actuación determinará la futura postura defensiva de Reino Unido y sus capacidades necesarias, y establecerá una hoja de ruta para alcanzar el 2,5% del PIB en defensa, bajo el marco de una política de "primero la OTAN" en el centro de los planes de defensa de Gran Bretaña, de acuerdo con la información facilitada por la Oficina del Primer Ministro.

“No hay deber más importante para mí como primer ministro que mantener segura a la gente de nuestro país”, ha afirmado Starmer. “En un momento en el que enfrentamos múltiples amenazas dentro y fuera del país, debemos asegurarnos de que estamos preparados para defendernos”, ha añadido: “Por eso he ordenado de inmediato una revisión exhaustiva que asegurará las defensas de Gran Bretaña para el futuro”.

El líder británico remarca cómo "al trabajar con nuestros socios más importantes en todo el mundo, nuestra Revisión de la Defensa Estratégica garantizará que el Reino Unido envía un mensaje claro a quienes buscan socavar la paz y la democracia: no tendrán éxito".

Reino Unido ya se marcó previamente como objetivo llegar a un gasto de defensa del 3% del PIB, una cifra muy por encima del 2% acordado en 2014 por los socios de la OTAN, y que Londres ya venía cumpliendo.

Compromiso con Ucrania

“El primer deber de nuestro gobierno es mantener seguro al país. Por eso aumentaremos el gasto en defensa y lanzaremos una Revisión de la Defensa Estratégica para asegurarnos de que tenemos las capacidades necesarias para proteger al Reino Unido ahora y en el futuro”. Esta revisión, apunta el primer ministro, “también expondrá reformas de defensa para garantizar adquisiciones más rápidas y una mejor relación calidad-precio”.

Starmer se ha comprometido igualmente al llegar al poder a mantener el apoyo a Kiev en su defensa frente a la invasión rusa. “La seguridad de Ucrania es nuestra seguridad, por lo que nuestra prioridad para Washington debe ser demostrar que el apoyo de la OTAN a Ucrania sigue siendo férreo y que nuestro apoyo será sostenido. Putin cree que puede esperar más que Occidente, pero se equivoca”, ha concretado.

“El primer ministro está decidido a garantizar que el Reino Unido sea uno de los principales actores de defensa en el escenario mundial y, junto con nuestros socios de ideas afines, demostrar que las democracias progresistas y pacíficas finalmente triunfan sobre la tiranía”, recoge la información oficial facilitada por el Gobierno británico.

Nueva estrategia industrial de defensa

La Revisión de la Defensa Estratégica “considerará la naturaleza de las amenazas que enfrentamos –incluida la brutal invasión de Ucrania por parte de Putin, la continua inestabilidad en el Medio Oriente y el ascenso de países autoritarios– y las capacidades que necesitamos para enfrentarlas”, continúa la fuente. Y aclara que esto “incluye la forma de nuestras Fuerzas Armadas y su disposición para luchar, mejorar nuestras asociaciones de defensa, desarrollar una nueva estrategia industrial de defensa, garantizar que nuestro personal de defensa tenga las capacidades y habilidades necesarias y llevar a cabo una reforma de las adquisiciones”. Esta revisión se llevará a cabo en consulta con aliados, la industria y expertos externos y de sus recomendaciones se informarán al primer ministro y al secretario de Defensa, además de presentarse ante el parlamento.