El astillero de Navantia en Ferrol construirá un nuevo buque de aprovisionamiento en combate (BAC) para la Armada por 439 millones de euros. Este nuevo programa de defensa ha sido anunciado este miércoles por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una visita al centro ferrolano donde se ha reunido con la dirección de Navantia y con el comité de empresa.
Sánchez ha detallado que este buque supondrá una carga de trabajo de 3 millones de horas en los astilleros de Ferrol y la creación de 1.800 empleos entre puestos directos e indirectos, incluyendo plantilla de Navantia, industria auxiliar y otros suministradores
El nuevo BAC estará basado en el buque Cantabria A-15 en servicio en la Armada desde 2010. "Este es un factor muy relevante porque implica la construcción del navío con la máxima celeridad sobre un modelo que ya existe y es referencia", ha resaltado el presidente del Gobierno. El proyecto también incorporará, ha asegurado Sanchéz, "todos los avances tecnológicos más recientes para la construcción".
Según fuentes sindicales, la orden de ejecución sería el próximo verano y el inicio del corte de chapa antes de final de año. El anuncio de este proyecto se produce pocos días después de que el comité de empresa de Navantia Ferrol pidiera más carga de trabajo para este centro de producción. El BAC era precisamente una de sus reivindicaciones, junto con la ampliación del programa F-110 y un nuevo Buque de Acción Marítima (BAM).
El nuevo buque de aprovisionamiento en combate es uno de los programas incluidos en la lista de prioridades de la Armada. La embarcación sustituirá previsiblemente al BAC Patiño al final de su vida, con casi tres décadas en servicio.
La Armada tiene en la actualidad dos buques de aprovisionamiento, los ya citados Patiño y Cantabria. Su principal misión es proporcionar apoyo logístico operativo a una fuerza naval o expedicionaria, aunque también puede actuar en operaciones no bélicas como por ejemplo ayuda humanitaria y defensa del medioambiente.
BAC Cantabria
Sánchez ha subrayado que el nuevo BAC será muy similar al Cantabria, construido en el astillero de Navantia en Puerto Real (Cádiz). El buque cuenta con cinco estaciones de aprovisionamiento, dos por banda y una por la popa, por las que puede transferir líquidos y sólidos. Dispone además de una amplia cubierta de vuelo y un hangar que permite el trabajo de helicópteros de tipo medio y pesado.
Sus tanques permiten almacenar más de 10.000 metros cúbicos de líquidos, distribuidos de la siguiente forma: 8.200 metros cúbicos de combustible para buques, 1.480 metros cúbicos de combustible para aeronaves y 200 toneladas de agua potable.
Para hacerse una idea de estas cifras, la capacidad de almacenamiento líquido a bordo equivale a 10 piscinas olímpicas.
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