Boadilla del Monte colocará en una glorieta el famoso cañón antiaéreo FT-44 de 88/56 mm

El Ayuntamiento de Boadilla del Monte ha aprobado la instalación de un cañón antiaéreo y antitanque FT-44 de 88/56 mm en una glorieta del municipio madrileño. La pieza será cedida en depósito por el Instituto de Historia y Cultura Militar (IHCM) del Ejército de Tierra. 

El FT-44 es la versión española del Flack 88 diseñado por ingenieros alemanes en los años 30 del siglo XX. El cañón se instalará en concreto en la rotonda donde confluyen la avenida Víctimas del Terrorismo y la calle Cristóbal Colón, justo al lado del parque Miguel Ángel Blanco. A continuación de la glorieta de la Constitución Española donde se encuentra el caza Mirage F1 desde 2021, tal y como recogió Infodefensa.com. 

El Flack 88 adquiere fama en la Segunda Guerra Mundial por su eficacia como cañón anticarro contra los tanques aliados primero en el frente en el norte de África y después el resto de los teatros de operaciones en Europa.  

A España, el arma llega antes en la Guerra Civil de la mano de la Legión Condor. De hecho, este conflicto fue el debut de la versión Flack 18 en combate como arma antiaérea y también contra carros de combate. La experiencia en la Guerra Civil permitió desarrollar después nuevas versiones del Flak 88 como la 36, 37 o la 41.  

España recibió entre el final de la contienda y la década de los años 40 más de un centenar de piezas Flak 16 y 36. Después, la fábrica de armas de Trubia produjo 240 unidades del modelo denominado FT-44, con las especificaciones del Flak 37, pero con el tubo monobloque del Flak 18. 

Polémica en Madrid  

El Ayuntamiento de Madrid, con Ana Botella como alcaldesa, instaló en 2013 en el distrito de Fuencarral-El Pardo una pieza de artillería de este tipo en homenaje a la artillería antiaérea española. Cuatro años después, en 2017, el consistorio municipal que dirigía entonces Manuela Carmena decidió la retirada del cañón, propiedad del Ministerio de Defensa, situado en una glorieta ubicada en el barrio de Montecarmelo. El ayuntamiento argumentó que se trataba de un modelo de cañón con pasado nazi, utilizado por el ejército franquista en la Guerra Civil.