La multinacional británica Rolls-Royce es la encargada de dotar de propulsión al nuevo carro de combate ligero M10 Booker del Ejército de Estados Unidos, derivado del modelo Ascod codesarrollado por España y Austria. La empresa ya ha entregado el primer motor MTU 8V 199 Powerpack a General Dynamics, fabricante de estos tanques. En total, la empresa entregará hasta 96 de esas plantas productoras como parte de la denominada fase de producción inicial de baja tasa (LRIP).Posteriormente está prevista la llegada de más unidades conforme el programa pase a la producción en serie propiamente dicha.
El cronograma previsto contempla que este LRIP del M10 Booker se prolongue hasta 2025 y la producción comience en 2026, “en espera de los resultados de las evaluaciones del LRIP”, aclara el fabricante.
Para el director de Defensa de Rolls-Royce Solutions America (filial estadounidense de Rolls-Royce Power Systems) Scott Hanson, esta entrega “marca un hito importante para nosotros, ya que representa el primer motor de producción en serie MTU que impulsa un programa de defensa terrestre del ejército de EEUU”. Además se trata, recuerda, del “primer vehículo de orugas de nuevo diseño del Ejército que se utiliza en más de cuatro décadas”.
El nuevo M10 Booker diseñado por General Dynamics Land Systems (GDLS) es un vehículo de combate de fuego directo que Rolls Royce describe como “altamente letal, móvil y con capacidad de supervivencia”. Se trata de una plataforma que combina diseños recientemente desarrollados y probados en combate “para dominar las amenazas terrestres en el campo de batalla multidominio”.
Cuatro tripulantes
Cada M10 Booker cuenta con una tripulación de cuatro personas y está dotado con un visor térmico mejorado, un cañón de gran calibre y un casco y una torreta livianos. De la propulsión se encarga la citada planta propulsora MTU 8V 199, que entrega 600 kW (800 hp) de potencia. Se trata de una solución “diseñada desde el principio para mejoras de capacidad, basadas en futuras necesidades operativas”, explica el fabricante.
La filial alemana de Rolls Royce encargada de estos motores, MTU Solutions, informa de que su serie 199 es el motor para vehículos blindados de combate más vendido en su tipo de potencia. Se trata de unos propulsores de seis y ocho cilindros caracterizados “por una potencia especialmente elevada combinada con un peso y un volumen especialmente reducidos”. La planta propulsora del M10 Booker “consta de motor, transmisión, sistema de enfriamiento, filtración de aire, sistema de energía, equipo de precalentamiento, administración de energía y características integradas del vehículo”. El fabricante la describe como uns solución “compacta, altamente integrada y extremadamente flexible”, y capaz de adaptarse “con precisión al perfil respectivo del vehículo y de la misión”.
Más de 2.500 blindados
Los propulsores MTU Serie 199 y Powerpack de Rolls-Royce impulsan en la actualidad más de 2.500 vehículos blindados ligeros en servicio de varias fuerzas armadas, explica la empresa. “Las versiones de este motor han demostrado su eficacia en varios vehículos blindados, entre ellos el español Pizarro, el austriaco ULA+N [basados ambos en el Ascod], el alemán Boxer y el polaco OPAL”. También están preparados para impulsar vehículos adicionales de naciones de la OTAN, como el Ajax [también derivado del Ascod] y el Boxer del ejército británico. Además de la factoría de Aiken, en el estado norteamericano de Carolina del Sur, donde se producen estos motores, Rolls-Royce también los fabrica en sus instalaciones de fabricación de Friedrichshafen, en Alemania, y en East Grinstead, en Reino Unido.
Rolls Royce, que el año pasado obtuvo unos ingresos de 12.690 millones de libras (casi 15.540 millones de euros al cambio actual), se encuentra en la actualidad desarrollando un aumento de potencia del anterior modelo superior de la serie MTU 199. El 8V 199 TE23 entregará de este modo 800 kW de potencia “para garantizar la mejor movilidad todoterreno posible incluso para vehículos más pesados”.