Tras el inicio de la invasión rusa de Ucrania, hace ya diez meses, el Gobierno español levantó el veto a la exportación de armamento y doble uso a Kiev y dio luz verde a la venta de material de defensa por casi 210 millones de euros (209,7 millones).
La Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (Jimddu), órgano que gestiona este tipo de operaciones, autorizó hasta doce licencias de exportación a Ucrania en el primer semestre de 2022, de acuerdo con el informe que la Secretaría de Estado de Comercio, de quien depende la Jimddu, ha remitido al Congreso, informa El País.
El Gobierno de Volodimir Zelenski ha pasado a ser uno de los principales compradores de munición española. Del total, 118 millones, más de la mitad, corresponden a proyectiles de artillería de 155 mm. En listado de armamento suministrado a Ucrania también aparecen bombas por 7,2 millones, armas de hasta 20 milímetros por 6,4 millones y equipos de protección como cascos y blindajes por 3,7 millones, detalla el informe de Exportaciones Españolas de Material de Defensa, de otro Material y de Productos y Tecnologías de Doble Uso del primer semestre del año.
No obstante, hay que destacar, tan solo se materializaron ventas por 18,2 millones en la primera mitad de 2022, debido a los exigentes controles de la legislación española. El resto de licencias quedaron pendientes de ejecución.
El informe no aclara si los más de 200 millones de euros son solo ventas por parte de la industria de defensa, es decir, contratos al uso, o si también incluyen el valor de las donaciones de material y armamento que el Ministerio de Defensa ha efectuado desde el pasado mes de febrero en diferentes envíos a Ucrania, entregas que también han pasado por la lupa de la Jimddu.
España en los últimos años no había exportado material de defensa y de doble uso a Ucrania -y tampoco a Rusia- e incluso llegó a denegar varias licencias de exportación de componentes y maquinaria ante el riesgo de su desvío para uso militar. La última venta de armamento de calado a Kiev, un país que dicho sea de paso tampoco es un gran cliente de la industria española, fue un lote de morteros embarcados Alakran de la empresa española Ventura Defense en 2017 -ejecutado dos años después-. Este sistema pudo verse en el frente durante las primeras semanas de la invasión rusa.
Casi 1.300 millones en ventas
El informe arroja exportaciones de material de defensa por casi 1.300 millones de euros (1.293 millones) entre enero y junio, lo que muestra un descenso del 20,1% respecto al mismo periodo del año anterior. Las ventas representaron un 30% de los contratos autorizados por el Gobierno español.
La tendencia es similar a otros años. La mayoría del material exportado, un 52%, fue a parar a países de la Unión Europa y aliados de la OTAN, sin embargo, en la primera posición aparece un país que no pertenece a ninguna de las dos organizaciones, Arabia Saudí, cliente por otra parte también frecuente de la industria de defensa española. El país del Golfo Pérsico recibió material por 302 millones de euros. Francia (187, Reino Unido (167) y Turquía (126), le siguieron.
El inicio de las entregas de las corbetas saudíes, construidas por Navantia, está detrás del incremento en las exportaciones a Arabia Saudí. El astillero estatal entregó en marzo la primera corbeta, un buque con un valor de 261,5 millones. El resto de las compras de Riad correspondieron a munición y componentes aeronáuticos.
Denegaciones a Rusia
Rusia se situó a la cabeza en licencias de exportación denegadas. La Jimddu no permitió la exportación de productos de doble uso como repuestos de un buque rompehielos o equipos para la reexportación a una planta nuclear en India. Además también revocó licencias ya concedidas por valor de 5,8 millones, tras las sanciones impuestas por la Unión Europea por la invasión de Ucrania.