La compañía Arquimea trabaja con el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) para obtener la certificación de su munición merodeadora Q-Slam antes de final de este año. La validación del sistema por parte del órgano dependiente del Ministerio de Defensa podrá fin a la fase de diseño y desarrollo y permitirá el inicio de la producción en serie del sistema.
El sistema pudo verse en acción por primera vez en el foro Ejército-Empresas de Toledo durante un ejercicio organizado por la Brigada de la Legión con vehículos no tripulados en el campo de maniobras de Los Alijares. Su desarrollo está financiado a través de un programa de la Dirección General de Armamento y Material (DGAM).
Durante el evento, la empresa informó que ya está en contacto con otras empresas para mejorar el sistema. Por ejemplo, analiza con Urovesa el diseño de un multilanzador para esta munición instalado sobre vehículos y también mantiene contactos con Indra para la integración del Q-Slam como pieza clave de un sistema antidrón.
El Q-Slam es una munición merodeadora de alta precisión, portátil, segura y fiable, según el fabricante. Está compuesto por tres ponentes: la antena y el tablet para el manejo, el lanzador y la plataforma aérea. Con una cabeza de guerra de 1,2 kg de Instalaza, está pensado para misiones antipersona y vehículos ligeros “con mínimos daños colaterales”. El despliegue se produce en menos de dos minutos, pudiendo localizar, rastrear y atacar objetivos estáticos y en movimiento. El sistema tiene un alcance de 15 km, una autonomía de 15 minutos, velocidad de crucero de 60 km/h y una altura operativa de hasta 200 metros, con capacidad para operar con vientos de 40 km/h.
La compañía destaca que en todo momento existe un control de la trayectoria durante el vuelo, con protocolos de seguridad definidos, y una espoleta electro-mecánica, desarrollada por Arquimea, para la activación o desactivación de la carga.
Munición merodeadora Q-Slam plegada dentro de su lanzador. Foto: B. Carrasco/Infodefensa.com
La gestión tanto del vuelo como de la misión se realiza a través de Flyxtation. Este software muestra los datos necesarios para cumplir la misión: el estado de la carga explosiva (armado/desarmado), la localización de los diferentes objetivos y detalles sobre el mapa y el video en tiempo real para mantener al piloto informado.
De cara a futuro, la compañía apuesta por mejorar el sistema con un incremento del alcance y la autonomía y la protección anti jamming. Además, trabaja para el vuelo en enjambre y el empleo de inteligencia artificial para la identificación de objetivos. Desde la compañía destacan además que el programa va “un año y medio por delante” de los plazos establecidos en el contrato con la DGAM y resaltan que el Q-Slam es prácticamente el único sistema loetering que existe en Europa con un nivel de madurez próximo al TLR 8.
El Ejército de Tierra apuesta dentro de su proyecto Fuerza 35 por dotar a sus unidades con munición merodeadora fiable y precisa, con capacidad además de discriminación de objetivos y de abortar la misión en todo momento.