El Ejército del Aire instala un caza Mirage F1 en la glorieta de la Constitución en Boadilla

El Ministerio de Defensa ha iniciado los trabajos para instalar en la conocida como glorieta del BM, en la localidad madrileña de Boadilla del Monte, un caza Mirage F1 donado por el Ejército del Aire a petición del Consistorio local. El avión, que ya está en la rotonda tras haber sido vaciado de sistemas con el fin de transformarlo en una pieza meramente museística, llegó a su nueva ubicación el lunes y será presentado este jueves.

La aeronave se montará sobre un poste en la glorieta de la Constitución Española, situada en la confluencia de la avenida Víctimas del Terrorismo y la calle Francisco Orellana y acondicionada para la ocasión por el Ayuntamiento de Boadilla. Las obras comenzaron el pasado mes de agosto y han contado con una inversión de 45.000 euros destinados principalmente a cimentar el lugar donde irá el poste que sostendrá el avión, al alumbrado y a adecentar el entorno.

El Ayuntamiento de Boadilla da así un nuevo paso en su reconocimiento a la labor de las Fuerzas Armadas tras la concesión de una avenida a la Armada española donde otra glorieta ha sido adornada con un ancla. El Consistorio espera completar este reconocimiento con una tercera glorieta dedicada al Ejército de Tierra donde pretenden instalar un carro de combate.

Los F1 llegaron a España en 1975

El Mirage F 1 es un caza de tercera generación (el caza español más moderno, el Eurofighter, está consierado de quinta generación) fabricado por la francesa Dassault Aviation en los años 60 e introducido por primera vez en los 70. El caza tiene una longitud de 15,4 metros, una envergadura de 8,4 metros y una altura de 4,5 metros. España adquirió los primeros en 1975 en un momento de tensión con Marruecos. Los últimos se adquirieron en los años 90 de segunda mano a Francia y Qatar.

Fueron retirados definitivamente en 2013 tras haber participado unos años antes, en 2006, en el despliegue español en la frontera rusa (Lituania) como parte de la misión de la OTAN. Tras su retirada, la mayor parte de los aviones fueron vendidos.