La presidenta de Corea del Sur visita Perú para promocionar el avión FA-50

La presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, ha realizado una atareada visita oficial al Perú, como parte de una gira por América del Sur, con la finalidad de fortalecer las relaciones bilaterales en sectores de mutuo interés. La presidenta ha aprovechado para sumarse a la intensa campaña dual (industria y gobierno) que el país asiático ha puesto en marcha para apoyar la venta de 24 aviones de entrenamiento avanzado y ataque ligero FA-50, fabricados por Korea Aerospace Industries (KAI), empresa que ya ha asentado ambos pies con firmeza en el suelo peruano. Este contrato se deba que la FAP requiere de reemplazo para sus aviones MB-339A y A-37 aún en servicio operativo.

Las relaciones entre ambos países han sido elevadas a carácter estratégico desde 2012. Durante su estancia en el país sudamericano, la presidenta surcoreana asistió a la ceremonia de presentación del primer avión de entrenamiento básico KT-1P ensamblado en los talleres del Servicio de Mantenimiento (SEMAN) de la Fuerza Aérea del Perú (FAP).

Otros candidatos con opciones a cubrir el rol LIFT (Lead-In Fighter Trainer) en Perú son el M-346 y el YAK-130, de origen compartido, y el L-15. El M-346 se posiciona para tal misión en Chile gracias a un acuerdo preliminar con el fabricante, Alenia Aermacchi; el Yak-130 aún representa una apuesta con interrogantes sobre la calidad del servicio de post-venta ruso y el L-15 implica comprar aviones de origen chino, cuya industria aeronáutica permanece, desde hace algún tiempo, en fase de consolidación.

El FA-50 representa una excelente opción de entrenamiento que se aproxima más a la performance de un avión de combate de primera línea que sus competidores en el segmento, pero que no llega a los niveles de un Dassault Mirage 2000P/DP como interdictor, pendiente la modernización de sus sensores y armamento, o los niveles del Sukhoi Su-25 como elemento de soporte aéreo cercano, para lo que no fue diseñado pero que el ambiente local peruano de presupuestos ajustados y usual controversia en torno a las compras de defensa podría así sugerirlo.

Foto: Presidencia del Perú