El ministro de Defensa de Chile, Alberto Espina, inició ayer una visita a la región de Magallanes y Antártica para conocer las capacidades de las Fuerzas Armadas en este entorno. Durante la visita, que continuará hoy, Espina realizó unas declaraciones de refuerzo a la necesidad de modernizar las bases antárticas chilenas establecida el lunes en el Consejo de Política Antártica y señaló por dónde debe iniciarse esa inversión: la localidad de Villa Las Estrellas (base Eduardo Frei). Espina fue claro al afirmar que "es urgente invertir a la brevedad” en dicha población.
El ministro aseguró que las instalaciones de la localidad, “no están las condiciones para seguir habitando esa villa, porque está muy deteriorada y lo que ocurre con todo lo que es la inversión en infraestructura es clave para la presencia chilena en un punto tan central, como es la base Eduardo Frei”.
Pese a que el presidente chileno, Sebastián Piñera, aún no se ha pronunciado oficialmente sobre las conclusiones del Consejo de Política Antártica, Espina garantizó su compromiso con el proyecto al asegurar que, para el presidente, “la Antártica es la proyección de Chile, mucho más allá de nuestras fronteras naturales y por eso vamos a tener una reunión junto al Canciller para fijar como vamos a invertir en la Antártica para que la presencia chilena se fortalezca y no se debilite”.
Cabe reseñar que la base Eduardo Frei es un enclave estratégico para Chile. Está considerada la puerta a la Antártica y, según el ministro, “desde ahí se proyecta hacia el Glaciar Unión y hacia el Polo todo lo que son las legítimas aspiraciones de Chile respecto a nuestra permanencia como un pionero en lo que fue el Tratado Antártico”.
Con este bagaje, es llamativa la situación de abandono que según Espina padece el lugar y que el ministro puso bajo la responsabilidad de su predecesor. “Esto es porque en el gobierno anterior, lamentablemente, no se hicieron inversiones y esto se fue agravando y al agravarse nos encontramos en una situación que la propia Fuerza Aérea ha considerado muy lamentable”, denunció Espina. En este sentido es de recordar que la base no solo es el lugar de trabajo de los militares, sino el hogar de sus familias. Unas 80 personas residen en la villa en invierno y casi el doble en verano.
Espina fue muy claro al valorar la situación de la base. Según el ministro, “los inmuebles están muy deteriorados, la enfermería está también en pésimas condiciones, los hangares que existen en el sector, donde se deben proteger los helicópteros que existen o los aviones, están también destruidos”. A eso hay que añadir que “hay graves problemas en los circuitos eléctricos”. El ministro justificó el estado de las instalaciones al recordar que “esta es una villa que tiene demasiado tiempo”. Espina reconoció que “se han hecho reparaciones en el pasado”, a las que calificó de parches, “no se puede seguir parchando lo que ya está archiparchado”, sentenció. Y para reforzar sus palabras adquirió un compromiso: “Nosotros, las Fuerzas Armadas a través del subsecretario para las Fuerzas Armadas, Juan Francisco Galli, estamos viendo también de los recursos que podamos disponer y que nos permitan lograr mejorar algo que es parte de la historia de Chile, si Chile es un país antártico por sobre todas las cosas”.
La situación es tan grave que incluso se habla de “retiro” de la base, si bien Espina aseguró que “vamos a contar con los medios necesarios para que no se materialice el retiro de la Villa Las Estrellas”. El ministro no pudo garantizar que ese retiro no se realice, si bien si se comprometió en que “si se llegara a materializarse, fuera por el menor tiempo posible”.
Espina viajó a Punta Arenas y allí subió a bordo del rompehielos Almirante Óscar Viel acompañado del subsecretario para las Fuerzas Armadas, Juan Francisco Galli; el jefe del Estado Mayor Conjunto, general de aviación Arturo Merino; y autoridades civiles y militares de la zona. En el buque fueron recibidos por el comandante en jefe de la Tercera Zona Naval, contraalmirante Ricardo Marcos.
En el rompehielos Espina fue informado de las capacidades antárticas chilenas y luego se trasladó al OPV Fuentealba, donde presenció una maniobra de rescate naval. El ministro acudió después a las instalaciones de la Brigada Acorazada Chorrillos de la V División de Ejército.