La Oficina Federal de Adquisiciones de Defensa de Suiza (Armasuisse) ya tiene todos los elementos para ultimar los informes de evaluación que le permitirán elegir un nuevo avión de combate para el país, después de que los cuatro candidatos con posibilidades hayan presentado su oferta mejorada esta semana. Si no se producen contratiempos, esta tarea concluirá durante el primer trimestre de 2021.
Las agencias gubernamentales de Alemania, Francia y Estados Unidos han sido las encargadas de entregar a las autoridades suizas las propuestas de sus fabricantes nacionales Airbus, por parte de Alemania, como empresa socia principal del avión de combate Eurofighter; Dassault Aviation, fabricante francés del caza Rafale; Boeing, que oferta su F/A-18 Super Hornet, estadounidense, y el fabricante, también estadounidense, del único modelo de quinta generación que se presenta, el F-35A, de Lockheed Martin.
Las ofertas mejoradas contemplan el precio para 36 y 40 aviones, incluida la logística y el armamento. Este elemento servirá como punto de partida vinculante para negociar más profundamente con el candidato ganador tras el momento de su elección.
También se recogen ofertas de cooperación entre las fuerzas armadas y entre las oficinas de armamento de ambos países (Suiza y el ganador) y proyectos de compensación planificados o en curso.
En un proceso aparte para el suministro de un sistema de defensa aérea de largo alcance, cuyas ofertas mejoradas también se recibieron el pasado miércoles, participan Francia, que opta con el sistema Samp/T de la firma Eurosam, y Estados Unidos, que participa con sistemas de misiles Patriot de la compañía Raytheon.
Al igual que con el nuevo avión de combate, previamente se invitó a los fabricantes contactados por agencias gubernamentales a que presentasen su oferta más ventajosa para Suiza.
En este este concurso de sistemas de defensa aérea, las ofertas últimas contemplan el precio de los sistemas, que deben ser capaces de cubrir un área de al menos 15.000 kilómetros cuadrados, incluidos logística y armamento. Igualmente servirá como punto de partida vinculante para negociaciones en profundidad con el candidato seleccionado.
La información de estas segundas ofertas, así como las conclusiones de las diversas actividades de prueba y evaluación, ayudarán a determinar la utilidad general de cada sistema. Los resultados se combinarán con un análisis de riesgo integral como parte de los informes de evaluación que compararán la utilidad general de cada competidor (caza y sistema de defensa tierra-aire de largo alcance) con sus respectivos costos de adquisición y costos operativos durante un período de tiempo de 30 años.
Estos informes de evaluación deberán estar finalizados en el primer trimestre de 2021, y la decisión sobre la selección de cada uno de los ganadores de los dos procesos deberá ser tomada por el Consejo Federal en el segundo trimestre de 2021.