Los F-16 MLU del Grupo de Aviación N° 7 de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) realizan los últimos preparativos para iniciar su viaje hacia la base aérea Natal en Brasil para participar en el ejercicio militar Cruzex Flight 2018.
La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) realizará la octava edición entre el 18 y 30 de noviembre. Se trata de un entrenamiento multinacional que contará con el despliegue de la FACh de 80 efectivos, junto a cinco aviones caza multirol Lockheed Martin F-16 MLU Fighting Falcon del Grupo de Aviación N°7, asentado en la Vª Brigada Aérea en Antofagasta, y una aeronave de reabastecimiento Boeing KC-135E Stratotanker del Grupo de Aviación N° 10, con base en la IIª Brigada Aérea en Santiago.
Cruzeiro do Sul, Cruzex, es uno de los ejercicios aéreos más importantes de la región, equivalente al que la Fuerza Aérea de Chile organiza en el norte del país y que tiene por nombre Salitre, el que se realizó el año 2004 en Iquique, 2009 y 2014 en Antofagasta, y que debiera ejecutarse en octubre de 2019.
Cruzex Flight 2018 tiene como propósito incrementar la interoperabilidad entre las fuerzas aéreas participantes, validar tácticas y compartir experiencias en el empleo del poder aéreo en misiones planificadas y ejecutadas bajo metodología OTAN.
La participación de la FACh en este tipo de ejercicios tiene como objetivo entrenar la capacidad de despliegue de aviones de combate F-16, mediante la realización de traslados aéreos a largas distancias con reabastecimiento en vuelo (REA); aumentar el alistamiento operacional de las tripulaciones de F-16 en la planificación y ejecución de operaciones aéreas bajo el concepto o normativa OTAN; adquirir experiencias respecto del empleo de material aéreo de combate de misiones de imposición de la paz, bajo el mandato de la ONU; evaluar, validad y/o actualizar las tácticas, técnicas y procedimientos empleados en la actualidad por las tripulaciones aéreas institucionales de F-16 y KC-135; e incrementar los lazos de amistad con las fuerzas aéreas de los otros países que participan en este ejercicio.
Los cinco F-16 despegarán desde la base aérea Cerro Moreno en Antofagasta, trasladándose en vuelo directo, sin escalas, hasta la ciudad de Natal lo que considera una distancia aproximada de 4.700 kilómetros (similar a un vuelo desde Punta Arenas a Lima), lo que obligará a que las aeronaves sean reabastecidas en vuelo por el tanquero KC-135.
La delegación chilena estará al mando del general de brigada aérea Leonardo Romanini, actual comandante en jefe de la Vª Brigada Aérea, quien se desempeñará como codirector de Cruzex 2018. El ejercicio contempla el uso de unas 100 aeronaves de guerra de los diferentes países que participarán.
En entrevista a El Mercurio, el general Romanini explica que la esencia de Cruzex es el despliegue de una decena de operaciones aéreas combinadas, cada una de ellas con 50 o 55 aviones de diferentes países que deben trabajar en conjunto para lograr un objetivo estratégico trazado por un comandante de misión, que en el caso de Chile, será Romanini. Es una por día y la FACh dirigirá la tercera; duran de cinco a seis horas e incluyen planificación previa, instrucciones, ejecución y validación de lo realizado.
Referente a las maniobras de reabastecimiento en vuelo, éstas se podrían replicar como entrenamiento entre aeronaves de distintos países. Romanini detalla que "es una maniobra antinatural, porque es como chocar con otro avión en el aire, que requiere gran coordinación entre el avión tanquero y el receptor, pues ambos vuelan a una velocidad de 600 a 700 kilómetros por hora. El tanquero traspasa unos 2.500 litros de combustible en unos cinco minutos".
Foto 1: Roberto Caiafa.
Foto 2: FAB.
Fotos 3 y 4: FACh.