Sascorp diseña un UGV anfibio capaz de portar un arma de 40 mm y cargar 1.700 kilos

La empresa española Sascorp está trabajando en el diseño de un vehículo terrestre no tripulado (UGV) adaptado para efectuar misiones anfibias y con una capacidad de carga de hasta 1.700 kilos. Esta plataforma también podrá incorporar un arma principal de 40 mm y lanzamisiles antitanque en la configuración como unidad de combate.

La directora de Operaciones de la compañía, Noemí Fernández, presentó este proyecto, denominado Tellus, en un reciente seminario online organizado por el Ejército y la DGAM sobre UGV. La compañía califica este programa como “un proyecto de desarrollo tecnológico nacional y puntero”, que está basado en su experiencia en el desarrollo de plataformas terrestres blindadas durante más de quince años. “Es un vehículo ligero de altas prestaciones de diseño modular con una alta movilidad y capacidad de carga, movilidad hibrida enchufable y elevada autonomía”, aseguró Fernández.

El objetivo de Sascorp es desarrollar una plataforma multipropósito especialmente pensada para misiones fuera de pista y adaptada a diferentes entornos y aplicaciones. Según la información facilitada por la empresa, el UGV tendrá 4,3 metros de largo por 2,3 de ancho y 1,8 de alto, y un peso de 3,5 toneladas. La capacidad de carga será de 1.700 kilos y dispondrá de enlace satelital y conciencia situacional para optimizar la conducción remota, aunque también incorporará la versión follow me.

Uno de los puntos fuertes, de acuerdo con Sascorp, es que esta plataforma estará diseñada para operar como vehículo anfibio. Podrá superar pendientes máximas frontales del 60 y laterales del 30 y será capaz de rebasar obstáculos verticales de 70 cm. Además, tendrá una importante capacidad de vadeo de hasta 1,7 metros.

La compañía, con sede en Trobajo del Camino (León), tiene previsto presentar el concepto de este UGV en la Feria Internacional de Defensa y Seguridad (Feindef), que se celebrará a principios de noviembre en Madrid, y, tras este evento, comenzará con el proceso de fabricación del prototipo que esperar poner a disposición del Ministerio de Defensa en un plazo de tres años.

El vehículo contará con suspensión neumática regulable y tracción a las seis ruedas independiente. Estará diseñado para alcanzar una velocidad máxima de 40 km por hora y de seis nudos en el agua. Respecto a la autonomía, será de diez horas en la versión terrestre y de ocho en la versión anfibia, con la opción de instalar dos depósitos auxiliares.

El vehículo terrestre no tripulado de Sascorp estará preparado para desempeñar cuatro misiones principales. En primer lugar, podrá actuar como unidad de zapadores. La capacidad de carga permitirá instalar una manguera explosiva para misiones de desminado y apoyo a la movilidad, una torre remota de 12,7 mm o un implemento delantero que podría ser una pala o rodillo antiminas.

También estará preparado para intervenir como unidad de combate. En este punto, la empresa afirma que el UGV será equivalente a un carro de combate de 30 toneladas. Podrá incorporar un arma principal de hasta 40 mm junto con una coaxial de 7,62 mm, además lanzamisiles antitanque, y dispondrá de protección balística. “Es una solución de gran letalidad, rápido acceso a orografía complicada, baja huella térmica y casi nula acústica y capacidad de uso en Infantería de Marina en desembarco y recuperación desde buques”, destacó Fernández.

La tercera configuración estará pensada para apoyar a las unidades en tareas logística. La empresa, en este caso, subraya que la elevada capacidad de carga y la opción follow me permite el empleo para el transporte de munición de material y su uso como unidad de apoyo. La representante de Sascorp expuso que “podría emplearse una unidad líder operada en remoto y varias unidades de transporte semiautónomas follow me, más otra unidad remota con capacidad de asumir el liderazgo, si la primera está comprometida”.

Por último, está la versión de apoyo a emergencias que podrá desplazarse por carretera, pista o fuera de pista, llegando a zonas de difícil acceso como áreas nevadas, abruptas, de costa, forestales o inundadas. En este caso, tendrá aplicaciones duales como la extinción de incendios, rescate y mantenimiento forestal. También contará con un remolque autopropulsado con una capacidad de arrastre de hasta 3,5 toneladas.

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