UNVEX live ha organizado con la compañía española Indra como protagonista el primer webinar del evento virtual. Los responsables de la empresa han detallado su participación en el entorno de la Civil UAV Initiative (CUI), una iniciativa impulsada por la Xunta de Galicia para desarrollar el sector aeroespacial en la región. En este sentido, la jefa de programa de MAR-2 de la fase B de la CUI, Silvia Rodríguez, ha explicado el proyecto, que ha sido llevado por Adantia, Indra y Sixtema, para tomar muestreos en aguas marítimas con sistemas marítimos de superficie opcionalmente tripulados.
Indra contribuye como socio tecnológico de la Xunta de Galicia en la CUI para impulsar la aceleración de pequeñas y medianas empresas (pymes) de cualquier lugar del mundo que quieran trabajar desde Galicia en el desarrollo de proyectos e ideas innovadoras en la industria de los drones civiles.
El proyecto MAR-2 “forma parte del programa soluciones de la CUI, en el que se desarrollan productos y servicios de alta madurez tecnológica que pueden llegar al mercado y comercializarse de forma rápida”, ha detallado Rodríguez. En este marco, Indra está trabajando en colaboración con las empresas gallegas Seadrone y Aimen en otro proyecto adicional que mejorará la recogida de datos y muestras en aguas costeras y oceánicas.
El desarrollo está basado en “una embarcación opcionalmente tripulada que dispondrá de un sistema robotizado para la captura de los datos y muestras de agua y su tratamiento posterior. Este sistema será capaz de recoger, clasificar, etiquetar, almacenar y conservar automáticamente todas las muestras. Dentro del proyecto, Indra se ha se responsabilizado, en colaboración con la empresa gallega Aeromedia, del desarrollo de los medios automáticos de captura de muestras y datos”, ha indicado Rodríguez.
El sistema ayudará a la Xunta de Galicia a controlar la calidad de las masas de agua de la comunidad y a preservar los ecosistemas fluviales y costeros. Multiplicará el número de muestras que se podrán recoger y aportará una agilidad sin precedentes para detectar cualquier vertido o anomalía. También facilitará la recogida de muestras en lugares de difícil acceso, reforzando la seguridad de los profesionales implicados en estas labores.
El sistema aéreo no tripulado se basa en un multirrotor de hasta 25 kilogramos de peso máximo al despegue, cuyo sistema de control ha sido optimizado. Dispone de diversos dispositivos y sensores para determinar de forma automática la profundidad y estado del fondo de ríos y costa, medir la altura de la capa fótica, capturar y explotar en tiempo real los datos de calidad de las aguas y llevar a cabo su muestreo, tanto a niveles de profundidad concretos como a lo largo de toda la capa fótica.
El nuevo dron permite recoger datos y muestras sin necesidad de contar con una embarcación y disponer de ellos de forma inmediata. Su empleo ahorra tiempo y ofrecerá una monitorización de las aguas mucho más precisa. “Gracias a él se podrá cubrir la vigilancia de zonas de mar muy extensas y recoger información de enrome calidad a un coste reducido”, ha concluido Rodríguez