La Armada española dará de baja este miércoles 10 de junio el submarino Mistral (S-73), tras 35 años de servicio. En diciembre del año pasado, se decidió cancelar la quinta gran carena de este submarino y proceder a su retirada del servicio, ante los avances de Navantia en el programa S-80 Plus.
Debido a las medidas de seguridad como consecuencia de la pandemia del coronavirus, no se celebrará el tradicional acto de despedida en el Arsenal de Cartagena, base de los submarinos españoles. No obstante, está prevista una ceremonia, cuando las autoridades y las circunstancias lo permitan.
Desde la Armada explican a Infodefensa.com que "más adelante se pretende hacer una ceremonia sencilla con el personal de la dotación y la del resto de los submarinos, como homenaje a esos 35 años de servicio y recuerdo de los cientos de miles de millas navegadas por los hombres y mujeres que han servido en él".
El submarino pasará por un periodo de desmontaje en el que se extraerán los componentes que estén en buen estado. Estos equipos quedarán como repuestos para los dos submarinos todavía activos. Este proceso consta de cuatro fases: desarme, clasificación del material y cargos, desmilitarización y distribución del material aprovechable.
"Durante todo este proceso se trata de sacar el máximo provecho del material que hay abordo en beneficio del arma submarina (equipos, sistemas, herramientas, piezas, repuestos, etc), ya sea para equipar al resto de submarinos, la base o la escuela de submarinos", detalla la Armada. Si bien, todavía no está decidido el futuro del buque, después las actuaciones citadas, casi con total seguridad acabará en el desguace.
Con la inmovilización del Mistral, la Armada operará durante al menos dos años solo dos submarinos -Galerna y Tramontana-, hasta la entrada en servicio del S81 Isaac Peral prevista para mediados de 2022.
El Mistral ha sido sometido a lo largo de su vida operativa a cuatro grandes carenas. Desde su entrada en servicio en 1985, el buque ha estado más de 3.000 días en sumergido bajo el agua y acumula alrededor de 250.000 millas (450.000 km) recorridas.
La quinta carena ya estaba autorizada por un importe de 43,2 millones de euros, sin embargo, la Armada optó por utilizar estos recursos para acelerar la entrada en servicio de los S-80 que construye Navantia, y cuyo primer submarino estará a flote a principios de 2021.
Mientras, la dotación de quilla del S-81 se está adiestrando ya en los simuladores del nuevo buque, instalados en el Arsenal de Cartagena. El arsenal también afrontará en los próximos meses obras de ampliación del muelle, necesarias para que los submarinos de la serie S-80 puedan atracar en un futuro.