La batería de misiles Patriot del Ejército de Tierra desplegada en Adana, al sur de Turquía, acaba de cumplir una década de operación ininterrumpida en el marco de la misión Persistent Effort de la OTAN. Junto con el sistema antiaéreo y equipos asociados, el contingente español está formado por unos 150 militares responsables de su operación en la base aérea de Incirlik.
El objetivo de la misión es proteger a Adana, la quinta ciudad de Turquía, ante posibles amenazas procedentes de la cercana Siria. A lo largo de diez años, cerca de 3.000 militares españoles han participado en la operación, repartidos en 21 contingentes.
Con motivo del aniversario, las instalaciones del destacamento español han acogido un acto presidido por la embajadora de España en Turquía, Cristina Latorre Sancho, acompañada por respresentantes de las naciones aliadas, como Turquía, nación afitriona; Estados Unidos, que despliega su 39th Air Base Wing en Incirlik; Polonia; y la célula NATO CIS.
Las tropas españolas se incorporaron a la misión de la OTAN en Turquía en enero de 2015. Desde entonces, la batería Patriot está desplegada en la base de Incirlik. Esta ubicación se decidió conjuntamente con Turquía, y en estrecha coordinación con el Comandante Supremo Aliado en Europa (Saceur), que ostenta el mando operativo de la misión y delega la responsabilidad del control operativo en el Mando Aéreo Aliado en la base aérea de Ramstein (Alemania).
El teniente coronel Fernando García-Reparaz Pardo de Santayana, jefe del contingente actual, señala que “el funcionamiento constante de nuestra batería ha sido posible gracias a la cooperación de Turquía y al apoyo prestado por el Ala 39 de los Estados Unidos. En este décimo aniversario, queremos trasmitirles nuestro agradecimiento. Esta colaboración entre países deja patente los lazos de amistad y lealtad entre países aliados”.
En 2012, al inicio de la misión, conocida entonces como Active Fence, la frontera turca estaba defendida por baterías Patriot de diferentes países de la Alianza. Estados Unidos desplegó en la ciudad de Gaziantep, Alemania en Kahramanmaras y Países Bajos en las proximidades de Adana. En 2015, los militares españoles relevaron a los neerlandeses en la defensa de esta última ciudad.
Posteriormente, Italia desplegó el sistema SAMP/T en la ciudad de Kahramanmaras por un periodo de tres años. Desde finales de 2019, España es el único país que mantiene el sistema Patriot en defensa de la frontera turca frente a la amenaza provenientes de Siria.
Está por ver el futuro del despliegue después de la caída del régimen de Al Asad en Siria. Ucrania ha llegado a interesarse por esta batería Patriot, si bien España ha rechazado en más de una ocasión su entrega, recordando que la misión es un compromiso con la Alianza Atlántica.
Sistema Patriot
La batería española Patriot está compuesta por cinco lanzadores, más un sexto que permanece en reserva, modelo PAC-2. Cada uno puede lanzar cuatro misiles al mismo tiempo. Junto con los lanzadores, el sistema, desarrollado por la empresa estadounidense Raytheon, dispone de un radar AN/MPQ-53, elemento fundamental para la ejecución de las funciones de exploración, seguimiento y adquisición de objetivos. Su alcance es superior a los 150 kilómetros, no obstante, en las mejores condiciones puede rastrear las trazas de objetivos hasta a más de 400 kilómetros. Tiene la capacidad de seguir hasta cien objetivos y nueve misiles en vuelo a la vez.
La conocida en el argot militar como Estación de Control de Empeño (ECS) es el corazón del sistema: determina los objetivos a seguir, calcula las órdenes de guiado del misil y establece las prioridades. La ECS coordina toda la acción en apenas cuatro minutos. Este centro de mando recibe toda la información útil, a través de la Central de Información y Coordinación (ICC), que también permite el contacto permanente del sistema con el escalón superior, el Mando Componente Aéreo de la OTAN, ubicado en Ramstein (Alemania). El cuartel alemán es el responsable último de la toma de decisiones.
El sistema desplegado por España puede lanzar 24 misiles al mismo tiempo y neutralizar un proyectil balístico a 80 kilómetros de distancia y hasta 40 kilómetros de altura. Todos los componentes están instalados sobre camiones todoterreno, lo que facilita la movilidad. Dos elementos completan el sistema Patriot: la planta de suministro de energía, con unos potentes grupos electrógenos, y un grupo de antenas con su cabina de comunicaciones.
En el caso español, los lanzadores utilizan misiles interceptores tierra-aire MIM-104C de más de cinco metros y un peso 900 kilos. Este misil puede permanecer en el aire entre nueve segundos y tres minutos y medio, e incorpora una cabeza de fragmentación de 91 kilos que explosiona cuando está cerca del objetivo.