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España, pieza clave en el plan de disuasión de la OTAN para desplegar hasta 60.000 efectivos en Europa central
La base aérea de Kuchyna, a pocos kilómetros al norte de Bratislava, acoge a un pequeño contingente de militares españoles, alrededor de 30 efectivos, con un papel fundamental, pero que ha quedado en cierta medida eclipsado por el despliegue en Lest, en el centro de este país, de 800 militares y más de 200 vehículos del Ejército de Tierra, el núcleo de la nueva brigada multinacional de la OTAN en Eslovaquia.
En Kuchyna, donde la Fuerza Aérea ya guarda bajo llave sus primeros cazas F-16, esta treintena de militares componen el conocido como Elemento Avanzado de Cuerpo de Ejército (CFE, por sus siglas en inglés), una especie de célula de enlace con el Cuartel General de Despliegue Rápido de la OTAN (HQ NRDC-ESP) en Bétera (Valencia).
El entramado de disuasión construido por la Alianza Atlántica tras la invasión rusa de Ucrania contempla que este cuartel general español lideraría la defensa del área de República Checa-Eslovaquia-Hungría en un conflicto de alta intensidad, como podría ser una guerra abierta con Putin en el flanco este, con un despliegue previsto de hasta 60.000 militares aliados de distintos países en su zona de responsabilidad. Ante este escenario, los primeros militares, de acuerdo con los tiempos de la OTAN, deben estar sobre el terreno en diez días y el cuerpo completo, en dos meses.
El CEF en Kuchyna no actúa como elemento de mando, sino que es un enlace con el cuartel general de Bétera; representan básicamente los ojos y oídos en la zona de operaciones. De llegar a un conflicto, el HQ NRDC-ESP desplegaría en pocos días en esta base aérea su puesto de mando al completo para dirigir las operaciones de ese cuerpo de ejército. Gracias a la presencia de este Elemento a modo de avanzadilla, el traslado del personal y los medios necesarios a Kuchyna para coordinar los movimientos en el área asignada sería más rápido y sencillo.
En ese escenario, la brigada multinacional en Eslovaquia, que también encabeza España, constituiría una unidad más al servicio del cuerpo de ejército.
El Elemento Avanzado, dirigido en la actualidad por el coronel Paredes, también hace de enlace con organismo de la OTAN, colabora en el refuerzo de capacidad militares en República Checa, Eslovaquia y Hungría, coordina actividades como ejercicios e instrucción en su área de responsabilidad y apoya las acciones de disuasión. De los 33 militares del CFE, el grueso pertenece al cuartel general de Bétera y al Regimiento de Transmisiones 21.
Hay que recordar que el Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad (CGTAD), al mando del teniente general Luis Sáez Rocandio, es una unidad del Ejército de Tierra que tiene la misión principal de adiestrarse para constituir un cuartel general de mando componente terrestre/cuerpo de ejército tanto para operaciones nacionales como a disposición de la OTAN -como es el caso de Eslovaquia-.
Unidad de helicópteros
En esta base aérea, el Ejército de Tierra planea también el despliegue a medio plazo de helicópteros, en concreto, dos Tigres del Batallón de Helicópteros de Ataque (Bhela) I de Almagro (Ciudad Real) y un NH90 del Batallón de Helicópteros de Maniobra (Bhelma) III. Esta unidad, compuesta por alrededor de 60 efectivos, quedará encuadrada dentro del Elemento Avanzado, al servicio de la necesidades no solo de la Brigada Multinacional que lidera España en Eslovaquia, sino también de otros compromisos que puedan surgir en el área asignada al cuerpo de ejército.
