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El Comandante del Mando Sur de EEUU visita Brasil en medio de la polémica con China
La comandante del US Southcom (Comando Sur de los Estados Unidos), la general Laura Richardson, llegó a Brasil el 24 de mayo, repitiendo la misma fórmula de importantes reuniones, tras cumplir con una extensa y significativa agenda en Chile y Colombia.
La vista durará dos días de intensas actividades que comenzaron en Brasilia, donde la militar norteamericana se reunió con jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas Brasileñas, el almirante Renato Rodrigues de Aguiar Freire. En la agenda figuraba el fortalecimiento de la cooperación regional norte-sur en el continente.
A continuación, y contando con el "refuerzo diplomático" de la embajadora de Estados Unidos en Brasil, Elizabeth Frawley Bagley, Richardson asistió al evento #WomenPeaceandSecurity (Programa Mujeres, Paz y Seguridad, de las Naciones Unidas) celebrado en el Colegio Militar de Brasilia.
Pero el día aún tendría espacio para otro compromiso importante.
Richardson también se reunió con el comandante del Ejército brasileño, General Tomás Miguel Miné Ribeiro Paiva, en la Sala de Reuniones del Alto Mando del Ejército, en el Cuartel General.
Asistieron a la reunión el Jefe del Estado Mayor del Ejército, general Fernando José Sant'anna Soares e Silva, y el Jefe del Departamento de Ciencia y Tecnología, general Aquiles Furlan Neto, así como miembros del séquito del General Richardson.
También el día 24, Laura se reunió con el Comandante de la Marina brasileña, Almirante Marcos Sampaio Olsen, para tratar cuestiones de cooperación y seguridad marítima en el Atlántico Sur.
El día 25, la general norteamericana se reunió con el comandante de la Fuerza Aérea Brasileña, brigadier Marcelo Kanitz Damasceno, donde continuó discutiendo el fortalecimiento de la cooperación regional norte-sur en el continente y una mayor interacción en materia de defensa.
Richardson visitó a continuación la sede del Comando de Operaciones Aeroespaciales (Comae), donde recibió una presentación detallada sobre las capacidades de planificación, coordinación, ejecución y control de las actividades de la Fuerza Aérea Brasileña en defensa de su espacio aéreo.
La agenda del general continuaba con una visita al Comando de Ciberdefensa del Ejército Brasileño, para trabajar en el fortalecimiento de las acciones multilaterales y el encadenamiento de esfuerzos ampliados para eliminar las amenazas cibernéticas regionales.
El Comandante del US Southcom se reunió con el ministro de Defensa de Brasil, José Múcio Monteiro, recibiendo nuevamente el "refuerzo diplomático" del embajador de los Estados Unidos en Brasil, y en la agenda, una vez más, temas sobre la cooperación regional en Defensa y la larga e histórica relación entre Brasil y los Estados Unidos como aliados.
En las redes sociales del Southcom de EE.UU. y de la Embajada de EE.UU. en Brasil se destacó la agenda de los días 24 y 25 de mayo. Sin embargo, del lado brasileño, hubo silencio en las redes sociales del ministerio de Defensa, que informó de operaciones contra la minería ilegal en la Amazonia, entre otros temas.
El factor chino
La general Laura Richardson es una activa e importante voz de agenda antichina en Sudamérica, cuya retórica ha sido bastante latente en los últimos meses, incluyendo afirmaciones sobre una "prohibición" implícita a los países sudamericanos respecto a la compra y empleo de armamento de origen chino.
Al mismo tiempo, empresas estatales chinas como Norinco se disputan la compra de importantes sistemas de armas para el Ejército brasileño. En la lista de deseos de los militares figuran carros de combate, obús de artillería sobre ruedas y vehículos de combate para la infantería.
De hecho, el propio Ejército brasileño ha programado para principios de junio un gran evento internacional en el que se debatirán dos temas estratégicos muy actuales, los conceptos de antiacceso y negación de área, o A2/AD, empleados por las superpotencias de Estados Unidos, China y Rusia.
A la cabeza de la lista de intereses A2/AD se encuentran las defensas costeras de largo alcance con misiles antisuperficie y medios aéreos, las capacidades espaciales (comunicaciones, posicionamiento y observación de la Tierra) y las ciberdefensas. Como la A2/AD es una estrategia, algunos países tienen visiones distintas sobre el empleo de sus capacidades.
Los rusos tienen la visión A2 de destruir las infraestructuras críticas y militares del adversario (carácter ofensivo, como se ha visto en Ucrania), mientras que los chinos tienen como objetivo las fuerzas desplegadas o en movimiento (carácter defensivo contra la Armada estadounidense).
¿Dónde encaja todo esto con la general Laura Richardson? En la misma semana en que Estados Unidos realizó una disuasión diplomática de alto nivel en Brasil, algunos sectores del actual gobierno brasileño estuvieron muy activos en la prensa local con respecto al evento del Ejército brasileño, pregunándose por qué China no fue invitada a participar. Esto explica por qué China fue incluida tarde en el evento (y aceptó rápidamente) y por qué el ministerio de Defensa brasileño evitó destacar la presencia de militares norteamericanos en Brasilia.
Todo ello explica por qué Richardson visitó el Centro de Ciberdefensa del Ejército en Brasil, habló con el comandante de la Marina (defensa costera de largo alcance mediante misiles) y con el comandante de la Fuerza Aérea (operaciones A2/AD en apoyo de las defensas costeras).
Paralelamente, las operaciones A2/AD son también el tema principal del I Seminario Internacional de Doctrina Militar Terrestre del Ejército Brasileño, evento preparado por el Comando de Operaciones Terrestres (Coter), que se celebra la próxima semana en Brasilia.
Además de Brasil, fueron previamente invitados representantes de Estados Unidos de América, Alemania, Reino Unido, Francia, España, Finlandia, Italia, Holanda, Portugal, Suecia, India, Sudáfrica, Egipto, Angola, Japón, Corea del Sur, Argentina y Chile. Posteriormente, China tuvo que ser incluida en el último momento.
