La Guardia Civil compra a Fecsa chalecos antibala por 1,5 millones

La Guardia Civil ha adjudicado a la empresa Fecsa un contrato para el suministro de un lote de más de 3.500 chalecos antibala internos para proteger a los agentes de sus unidades. El contrato tiene un presupuesto de 1,5 millones de euros y un plazo de ejecución de tres años.

Cada chaleco irá acompañado de una bolsa de transporte, hoja de instrucciones para el adecuado empleo y conservación, dos paneles balísticos (frontal y dorsal) y una funda exterior, de acuerdo con los pliegos del contrato a los que ha tenido acceso a Infodefensa.com. 

La compañía proveerá a la Guardia Civil de 2.835 chalecos masculinos por 1,2 millones y 708 chalecos femeninos por 300.000 euros. Ambos importes incluyen impuestos. El plan es adquirir unos 945 chalecos (de los dos tipos) cada año entre 2023 y 2025. Fecsa se ha hecho con el contrato con una oferta por unidad de 316,21 euros, sin impuestos, en el caso de los masculinos, y de 330 euros en los femeninos.  

La única diferencia entre los chalecos masculinos y femeninos serán aquellos aspectos relacionados con el diseño (tallaje, diseño específico femenino o protección para mejorar la resistencia en la zona de pecho y esternón). Este tipo de chaleco puede colocarse bajo las prendas de vestir habituales en servicio, ya sea de paisano o de uniforme. Deberá proteger frente a disparos de calibre .357 Magnum (proyectil semiblando) y 9 mm parabellum (proyectil blindado y encapsulado) y también evitar la penetración de cuchillos o punzones.  

La compra de chalecos antibalas para la protección de los agentes es una de las reclamaciones desde hace años de las asociaciones de guardias civiles que critican que estos medios no están a disposición de toda la plantilla en situaciones de riesgo.  

La Guardia Civil detalla en los pliegos del contrato que “los chalecos antibala que se pretende adquirir son idóneos, debido a su sistema rápido y sencillo para acoplarse y fijarse al cuerpo, peso ligero, flexibilidad, espesor, comodidad y alto nivel de protección, permitiendo desempeñar las misiones encomendadas a los componentes del cuerpo de forma segura frente a impacto producidos por armas de fuego que puedan poner en peligro su integridad".   

El contrato ha sido gestionado a través de la Jefatura de Asuntos Económicos de la Guardia Civil. Este órgano recibió dos ofertas, la de Fecsa y otra de Source Vagabond Systems. Esta última fue rechazada por no cumplir con los requisitos de los pliegos. En la elección se ha tenido en cuenta el precio (con hasta 60 puntos) y otras cuestiones técnicas (40 puntos) como la flexibilidad y la disminución de huella o trauma tras el disparo, de masa o del espesor del panel balístico.