EEUU encarga a la industria los carros Abrams que enviará a Ucrania, lo que ralentizará el proceso

Los 31 carros de combate Abrams que Estados Unidos se ha comprometido a suministrar a Ucrania llegarán al teatro de operaciones cuando los Leopard 2 europeos ya estén allí. Washington, que lidera la ayuda militar a Kiev (le ha enviado material valorado en más de 27.000 millones), va a llegar en este caso rezagada tras Europa, que tiene previsto aprovisionar más tanques y antes que los norteamericanos.

Frente a los dos batallones de tanques que se ha comprometido a enviar la coalición de Leopard 2 que se ha formado en Europa, Washington ha apuntado que sus 31 M1 Abrams son los requeridos para equipar un batallón ucraniano. Junto a ellos, EEUU suministrará ocho vehículos de recuperación M88, modelo basado en el casco de los antiguos carros M60 y preparado para operar junto a los Abrams, con los que además comparte distintos elementos.

El propósito de estos carros, de acuerdo con el presidente estadounidense, Joe Biden, es atender la necesidad ucraniana de “mejorar su capacidad en terreno abierto”. Para ello, ha añadido, “necesitan una capacidad duradera para disuadir y defenderse de la agresión rusa en el largo plazo”.

Hasta aquí las pretensiones de esta ayuda están claras, lo que no parece tan claro es que con este suministro las tropas ucranianas vayan a “ser capaces de contrarrestar las tácticas y estrategias en evolución de Rusia en el campo de batalla a muy corto plazo”, que es otra de las variables a la que Biden se ha referido al explicar el envío. Las información transmitida por el Pentágono sobre este asunto parecen, sin embargo, descartar esa posibilidad de que los Abrams vaya a poder estás listos “en el campo de batalla a muy corto plazo”.

En el mismo comunicado oficial en el que el Departamento de Defensa de Estados Unidos recoge las citadas palabras del presidente, se advierte textualmente que los Abrams, a los que se describe como “los tanques más capaces del mundo”, “también son extremadamente complejos de operar y mantener”. Si bien el envío norteamericano a Ucrania incluirá “las piezas y el equipo necesarios para reparar y mantener de manera efectiva estos tanques en el campo de batalla”, no es probable que todo el paquete pueda estar listo con la celeridad pretendida.

Un paquete valorado en 400 millones

El Pentágono se ha comprometido a dar capacitación sobre logística y mantenimiento a las tropas ucranianas lo antes posible, a la vez que reconoce “la entrega real de estos carros de combate llevará algún tiempo”. En este caso, a diferencia de otro material con el que Estados Unidos ya ha abastecido a Ucrania, su origen no es la llamada Autoridad Presidencial de Reducción de Armamentos (PDA), lo que básicamente significa que se trata de equipos procedentes de las existencias militares del país, una fórmula que facilita que las entregas se hagan con mayor rapidez. Para los Abrams, en cambio,se va a emplear la denominada Iniciativa de Asistencia a la Seguridad de Ucrania (USAI), a través de la cual se adquieren nuevas capacidades a la industria para derivarlas a Kiev, lo que precisa de un mayor periodo para tener el material listo. Este paquete de la USAI está valorado en 400 millones de dólares.

El Departamento de Defensa precisa, tras detallar estos puntos, que junto a este “batallón de tanques Abrams proporcionado por los Estados Unidos, un consorcio europeo se compromete a proporcionar dos batallones de tanques Leopard a Ucrania a corto plazo”.

De momento no se ha revelado cuándo está previsto que los Abrams, que además precisan de un periodo de formación más extenso que los carros europeos, comiencen a operar en las llanuras ucranianas frente a los carros rusos. Únicamente se tiene claro, según fuentes oficiales, que su aparición en el teatro de operaciones no tendrá lugar hasta dentro de meses, probablemente incluso dentro de un año. De este modo, los Leopard 2 serán los primeros carros occidentales que pasarán a la acción en esta guerra, con probabilidad junto a los Challenger 2 británicos comprometidos.

27.100 millones en ayuda de EEUU

Desde que comenzó la guerra, el pasado 24 de febrero, EEUU ha comprometido 27.100 millones de dólares en asistencia de seguridad a Ucrania. En esa cantidad se incluyen, además de los 31 Abrams, otros 45 carros de combate T-72B (de origen soviético), 109 vehículos de combate de infantería Bradley, 20 helicópteros Mi-17, 160 obuses de 155 mm, 72 obuses de 105 mm, 300 blindados sobre orugas de transporte de personal M113, 250 blindados sobre ruedas M1117, 580 vehículos protegidos contra minas y emboscadas (MRAP), seis camiones blindados, 58 patrulleras costeras y fluviales, 90 transportes blindados de personal Stryker, más de 1.700 todoterrenos HMMWV, más de un centenar de vehículos tácticos ligeros, 298 vehículos tácticos para remolcar armas, 34 vehículos tácticos de recuperación de equipos, 30 vehículos de apoyo de municiones, 44 camiones y 88 remolques para el transporte de equipamiento pesado, 38 sistemas de cohetes de artillería de alta movilidad, diez vehículos de puesto de mando, una batería de defensa antiaérea Patriot, más de 1.600 sistemas antiaéreos Stinger, más de 8.500 sistemas anti blindados Javelin, y 100 vehículos blindados de tratamiento médico, entre otro material, que incluye cientos de miles de proyectiles de munición de gran calibre, entre elleas unidades guiadas de precisión y cohetes, además de cientos de generadores, miles de sistemas de visión nocturna, etc.