Tal día como hoy, 7 de enero, pero de 1908, se promulga de la ley de la Escuadra para dotar al país de fuerzas marítimas tras los desastres sufridos en las guerras de Cuba y Filipinas.
La Ley fue impulsada por Antonio Maura y José Ferrándiz y Niño, y supuso el comienzo de la reconstruccion de las fuerzas navales españolas tras las pérdidas materiales de los enfrentamientos con Cuba y Filipinas en 1898. Llevaría el nombre de Plan Ferrándiz.
En 1914, el ministro de la Marina, almirante Augusto Miranda y Godoy, fue quien logró que se aprobara la ley que, finalmente, llevaría su nombre. Fue presentado y leído en las Cortes, aunque Miranda decidió retirarlo antes de su discusión para modificarlo al inicio de la Primera Guerra Mundial.
En febrero de 1915 se aprobó la ley Miranda, que incluía las siguientes unidades: cuatro cruceros ligeros, seis destructores, 28 submarinos, tres cañoneros y 18 guardacostas. El plan supuso el nacimiento de la Arma Submarina Española.