El general en situación de retiro Gustavo Arturo Bobbio Rosas se ha convertido en el sexto ministro de Defensa de Perú en menos de año y medio de gestión del presidente Pedro Castillo. Bobbio reemplaza en el cargo al renunciante Daniel Barragán, quien ejerció poco más de dos meses como ministro.
Bobbio es licenciado en Ciencias Militares con mención en Ingeniería por la Escuela Militar de Chorrillos; magíster en Realidad Nacional, Defensa y Desarrollo y doctor en Políticas Públicas de Seguridad Nacional y Desarrollo Sostenible, ambos por la Universidad Alas Peruanas.
En cuanto a experiencia profesional se refiere, se ha desempeñado como director del Instituto Geográfico Nacional; director de la Escuela de Ingeniería del Ejército; profesor de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y de la Universidad Norbert Wiener, recientemente trabajó como jefe del Gabinete de Asesores de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) durante la gestión de José Luis Fernández Latorre como jefe de dicha entidad, quien como informó Infodefensa fue detenido preliminarmente - y liberado días atrás - en el marco de una investigación fiscal sobre compras irregulares en la estatal PetroPerú, situación que motivó que fuese separado del puesto.
Inestabilidad en el Ministerio y las FFAA
En línea con la alta rotación en el Despacho Ministerial del sector Defensa desde la llegada de Castillo a la Presidencia de Perú, es muy probable que la gestión Bobbio sea igualmente breve a la de sus predecesores, lo que perjudica seriamente la administración del sector, habida cuenta que el ministro entrante debe familiarizarse con la situación presente, recibir el informe de salida de la gestión previa, generar dinámica con su equipo de trabajo en el Ministerio, tomar contacto con los altos mandos militares, tomar conocimiento situacional y los proyectos en curso de cada instituto y promover el avance del proyecto de modernización de las Fuerzas Armadas, que en el último año y medio no ha pasado del papel a la realidad.
Asimismo, le corresponde al nuevo ministro asegurar que el cierre de año y el inicio del nuevo no afecte la institucionalidad de los institutos armados y de las otras entidades adscritas al sector, en un contexto complicado con un presupuesto sectorial que ha recibido severas críticas por la escasez de recursos asignados y por las numerosas investigaciones -solo Castillo tiene abiertas 52 carpetas fiscales- que lleva adelante el Ministerio Público ante presuntos actos de corrupción en el Poder Ejecutivo de Perú.