​GD R. Roldán (Infantería de Marina): "Después del verano comenzará la actualización de los Piraña de la versión 2" (y2)

El general de división Rafael Roldán, comandante general de la Infantería de Marina, aborda en la segunda parte de la entrevista a Infodefensa.com los planes para la actualización de media vida de los vehículos Piraña, así como la necesidad de potenciar la artillería y el uso de drones. También explica cómo marcha el programa para sustituir a los veteranos Hummer por Vamtac.

Viene de: 'GD R. Roldán (Infantería de Marina): "Nos hemos decantando por el ACV de los Marines" (1)'

La primera fase de los Piraña ya ha sido modernizada, ¿Cuándo está previsto comenzar con la actualización de la segunda fase?

Es un programa de actualización de media vida que tuvo que retrasarse por una cuestión económica. Hemos terminado con los Piraña de la versión 1 y nos metemos desde este año hasta 2025 en la modernización de los 21 restantes de la versión 2. Está programado, hay recurso asignado y empezarán a entrar pronto vehículos en la fábrica. La idea es actualizar a una media de seis por año. Después del verano, comenzaremos a llevar los vehículos a la planta a demanda de la empresa para comenzar con la revisión industrial.

¿Qué planes tienen en la artillería?

Recibimos seis obuses del Ejército de Tierra, de los que se ha hecho la rehabilitación industrial de cuatro de ellos, incluido el cambio de cañón. El problema que teníamos es que no había piezas de repuesto para el modelo A2, y ya no era posible mantener el obús en condiciones óptimas. Por eso, fue necesario hacer la transición al modelo A5 del Ejército y ahora mismo están en un proceso de rehabilitación. Tenemos que tener una artillería de campaña para acompañar a las unidades mecanizadas y mantener la remolcada porque también da versatilidad de desembarco desde helicóptero. Ir de la mano con Tierra es bueno porque homologamos material y además estamos metidos con ellos en el desarrollo del Grupo de Artillería del futuro, del que ya existe un documento de necesidad operativa. Todavía no hay un modelo definido, no sabemos si será ruedas o cadenas, pero lo que sí está claro es que el sistema para la Infantería de Marina tendrá que tener capacidad de vadeo. La artillería es el elemento principal de apoyo de fuego a las unidades de desembarco, por eso es muy importante.

Otro actor clave en un futuro serán los drones

Ucrania nos ha abierto los ojos. Los drones son un elemento que se usa de forma cotidiana a unos niveles de fuerza muy bajos, incluso de patrullas. Dentro del programa Rapaz, definimos las características de los drones que necesitamos. Para guerra naval especial, unidades más ligeras y pegadas al terreno, se necesitan drones Micro que permiten ver lo que hay dentro de un edificio. Para Infantería de Marina, apostamos por los Mini para dar cobertura a la fuerza de desembarco una vez desplegada y ver que hay detrás de la colina. Drones con el Scaneagle permite observar en tiempo real dónde está el enemigo e influye en la percepción y el planeamiento en tierra. Y, a bordo de buques, por ejemplo, el operador puede ver en tiempo real la cubierta del barco en un rescate de rehenes. Es una capacidad que permite hacer un planeamiento mucho más efectivo y además dar protección a la fuerza. Los drones son el futuro. Tenemos identificados los medios que queremos, la cantidad y el nivel de unidad a repartir, solo es cuestión de tener el recurso.

¿Tienen previsto sustituir el Scaneagle?

Sobre el Scaneagle, diría que goza de plena salud. Aporta muchas capacidades cambiando la carga de pago, con un tiempo de vuelo que permite el planeamiento e incluso conducción y ejecución del ejercicio. Permite además no solo operar desde tierra, sino también en la mar, como está usándose. En principio, tiene una larga vida por delante. Tenemos que ver dónde vamos en tierra. Para las unidades, como decía, lo que necesitamos son los Mini que hacen posible tener varios sistemas operando en vuelo en la zona de influencia. Y para unidades de operaciones especiales, los Micro.

¿Cómo marcha la entrega de los Vamtac? ¿Cuándo reemplazarán totalmente a los Hummer?

Estamos prácticamente al 50% del programa de Vamtac que contempla 205 vehículos en total. Ya hemos recibido 102 unidades. Hasta finales de año, llegarán 17 más. El programa está muy bien orientado y casi terminándose. En la medida que se incorporan los Vamtac a la unidad, se van dando de bajo los Hummer más antiguos. De todas formas, la Hummer todavía le queda vida, sobre todo como portashelter, son un vehículos muy duros, muy sufridos y fácil de conducir.

¿Cómo está respondiendo el nuevo Vamtac portamortero?

Ahora mismo estamos en experimentación con un vehículo que nos entregó la empresa, pendientes de recibir dos más, hasta un total de 18 unidades. Estos vehículos dotarán a los batallones de fusiles incluido el mecanizado de seis tubos por cada uno de los batallones. Cada batallón tiene su propio apoyo de fuegos y el más importante es el mortero de 81 mm. Tradicionalmente el mortero lo llevaban las escuadras de fusileros de la sección de morteros de 81 mm de los batallones. Al incorporarlo a un vehículo lógicamente gana en movilidad y protección. El mortero se asienta en poco tiempo, hace los disparos iniciales, corrige con la ayuda de un dron prácticamente en automático, sale de la posición y busca otro asentamiento para seguir combatiendo. No podemos olvidar que seguimos siendo una unidad de fusiles, una unidad ligera, el vehículo con mortero está muy bien porque acompaña a la fuerza, pero habrá casos en que no podrá ser así y hay que mantener el mortero convencional con su escuadra con la capacidad de helitransporte por si tenemos que desplegar una unidad y las condiciones de la mar no lo permiten, tener la posibilidad de que esa unidad que está en tierra pueda seguir teniendo su propio apoyo de fuegos.

¿Qué mejoras tienen previstas en las infraestructuras?

En los campos de adiestramiento vamos a seguir potenciando la construcción de instalaciones para el combate en población o puertas ‘breaching’ para practicar la entrada en edificios o barcos. También vamos a construir casas de intervención para el combate en el interior de edificios; una, en el campo de adiestramiento Sierra del Retín y luego exportaremos el procedimiento a otras zonas.