El astillero semipúblico francés Naval Group ha colocado la quilla de la primera fragata de defensa e intervención (FDI) para la Armada de su país. Francia ha encargado cinco de estas naves del modelo que hasta hace tres años era conocido como fragata de tamaño intermedio (TFI), y que para el mercado internacional lleva el nombre de Belharra. Se trata del mismo tipo de buque que el fabricante está negociando suministrar a Grecia.
Con este hito comienza el montaje de la nave, cuya construcción comenzó hace dos años y que deberá entregarse en 2024. La quinta fragata de la serie que ha encargado Francia deberá estar lista en 2030, según el cronograma previsto.
El mismo día de esta puesta de quilla, el pasado jueves, el fabricante también encendió el Módulo de Inteligencia y Sensores Panorámicos (PSIM), denominación del mástil integrado que equiparán las FDI. Con esta actuación arrancan las pruebas del sistema de combate completo de la fragata, varios meses antes de su integración final en el buque.
En su intervención durante el acto, el consejero delegado (CEO) de Naval Group, Eric Pommellet, ha destacado que se trata de un buque “ya elegido por Grecia para su Armada”.
La primera unidad de la serie, al que ya se ha colocado su quilla, recibirá el nombre de Amiral Ronarc'h, en honor al Jefe de Estado Mayor de la Armada francesa en los años 1919 y 1920, que se distinguió durante la Primera Guerra Mundial.
Un millón de horas cada nave
Cuando esté terminado, dentro de tres años, el buque desplazará 4.500 toneladas a lo largo de 122 metros de eslora y casi 18 de manga y acogerá a una tripulación de 125 oficiales y marineros, más otros 28 pasajeros si es necesario. En esa dotación se incluye al personal de aviación embarcada, ya que cada buque será capaz de alojar un helicóptero y/o un dron. Su autonomía alcanzará los 45 días, y será capaz de navegar a una velocidad máxima de 27 nudos Sus capacidades llegarán a todos los campos del combate naval: la lucha antisubmarina, la antiaérea, la guerra contra naves de superficie y la proyección de fuerzas especiales.
El fabricante estima que la construcción de cada unidad precisará de un millón de horas de trabajo en las instalaciones de la compañía de Lorient, al oeste del país, donde ya se fabrica la primera unidad. En total trabajarán a tiempo completo en este programa más de 1.200 empleados de Naval Group, más los empleados de las 400 subcontratistas que participan en el proyecto.