La ministra argentina de Seguridad, Sabina Frederic, mantuvo una extensa videoconferencia con la Comisión de Seguridad Interior de la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación. La reunión tuvo como objetivo brindar información acerca de las acciones llevadas a cabo por el Ministerio en el marco de la pandemia del Covid-19, pero una frase acerca del ciberpatrullaje en las redes generó polémica.
En primer lugar, la ministra describió las decisiones que el Ministerio fue tomando a medida que el presidente argentino, Alberto Fernández, fue sancionando los Decretos de Necesidad y Urgencia que han definido las políticas estatales ante la creciente pandemia.
Frederic enumeró las capacitaciones brindadas a los miembros de las fuerzas para ejercer su trabajo, la provisión de los insumos necesarios para sus miembros y la tarea asumida en calidad de asistentes sanitarios en aquellos lugares del país donde no hay otras agencias del Estado más que las fuerzas de seguridad. Además, recordó la asistencia sanitaria brindada en fronteras, buques, aviones y el control ejercido sobre las personas que debían y deben guardar cuarentena.
Tras ello, Frederic explicó que dentro de las tareas preventivas que se encuentra realizando el ministerio para mantener el orden se destaca el ciberpatrullaje, para la prevención de delitos promovidos según el "humor social".
La ministra explicó que “esas lecturas permiten detectar tendencias y patrones que posibilitan anticipar problemas criminales que pueden afectar la seguridad interior". Y enfatizó: "Es una tarea estrictamente preventiva".
Este punto de la reunión fue el que generó polémica en los medios y en las redes sociales. El término "humor social" vinculado al ciberpatrullaje en internet y redes sociales encendió las alarmas de quienes sintieron su libertad de expresión amenazada.
Pero Frederic explicó: "No se trata de invadir la vida privada de nadie ni afectar la libertad de expresión y opinión. Nuestra función como ministerio es conocer las tensiones y las prácticas que pueden alentar la comisión de delitos. Esas prácticas son denunciadas ante el Poder Judicial para que éste decida qué hacer. Hacer ciberpatrullaje es estar atentos a las tensiones sociales y a la incitación a cometer delitos como la convocatoria a saqueos".
Críticas de la oposición
La exministra de Seguridad Patricia Bullrich no tardó en criticar los dichos de quien fuera su sucesora. A través de su cuenta de Twitter (@PatoBullrich), la exfuncionaria macrista sostuvo que tratar de medir el "humor social" a partir del ciberpatrullaje "se llama espionaje y es un gravísimo delito" y que esta modalidad de la ciberseguridad se debe utilizar "contra el terrorismo, narcotráfico, grooming, violencia de género, amenazas, etc”.
Al día siguiente, en diálogo con una radio local, Frederic se defendió: "Nosotros estamos totalmente en contra de cualquier tipo de tarea de ciberespionaje, yo jamás autorizaría una cosa como esa". Aunque reconoció: "A partir del alboroto que generó mi exposición, estamos revisando el protocolo con el que trabajamos este tipo de patrullaje para someterlo a la comisión. Es fundamental para transparentar el uso de esa herramienta".