El almirante Antonio Martorell Lacave ha tomado posesión como nuevo Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada en sustitución del almirante Teodoro López Calderón, ascendido recientemente a Jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), y lo hizo lanzando un deseo de estabilidad presupuestaria en el que implicó a la propia minsitra de Defensa, Margarita Robles, que presidía el acto, y haciendo una defensa en firme de las necesidades de invertir en defensa y de defender la industria sectorial como motor tanto económico como tecnológico.
Durante su intervención, Martorell apremió a la ministra a que, "bajo su iderazgo, dejemos encauzada una estabilidad presupuestaria que permita un empleo óptimo de los recursos asignados". El almirante aseguró que entre sus objetivos el principal es continuar con el plan de transformación de la Armada, aunque reconoció que no será un camino sencillo de seguir. "Invertir en defensa es siempre objeto de polémica, porque la seguridad es un intangible que solo se hecha de menos cuando se pierde, y ya suele ser tarde", explicó Martorell, que no solo reconoció el problema, sino que también ofreció soluciones para hacer llegar a gran público esa necesidad.
En este sentido habló de "la industria de defensa y la riqueza que genera, no solo económica sino también en áreas como la investigación, el desarrollo, la innovación", todo esto, insistó en el nuevo Ajema, "sí es tangible".
Por su parte, Robles destacó en su intervención la "proyección europeista" de Martorell y su trabajo al mando de la Operación Atalanta, en la que Europa ha puesto en jaque a la piratería en el océano Índico. Según la ministra, "España quiere jugar y jugar fuerte en la Unión Europea y en la OTAN"
Martorell juró su cargo en el cuartel general de la Armada ante la propia ministra, y la cúpula militar, reunida en pleno para la ocasión, además de ante la secretaria de Estado (Sedef), Esperanza Casteleiro, y la subsecretaria (Subsedef), Amparo Valcarce.
La ministra también aprovechó el acto para afear las críticas del vicepresidente Pablo Iglesias contra el sistema democrático español. "La democracia española es una de las más avanzadas del mundo”, aseguró Robles, que insistió en varias ocasiones en que España no posee carencias en este ámbito sino que "tiene una democracia plena".