La cultura de defensa de cualquier país debe partir necesariamente de una base de conciencia e identidad nacional. En unos de los puntos de nuestra actual Directiva de Defensa Nacional, se apremia acentuar el esfuerzo en la comunicación estratégica de la defensa, con objeto de fomentar la conciencia de nuestra defensa nacional.
Pues reflexionemos, sobre cuál es el grado de conocimiento, de preocupación e implicación y corresponsabilización de los ciudadanos españoles por los temas de cultura de defensa y por los valores nacionales. En la sociedad española hay una alta contradicción en la buena valoración que se tiene por nuestras Fuerzas Armadas por parte de los ciudadanos y su posición contraria al aumento de recursos humanos y técnicos dedicados a la defensa nacional, asignados en los presupuestos.
También vemos que nuestra sociedad vive una profunda crisis de valores nacionales y siente una gran desconfianza hacia las instituciones del estado y manifiesta muy poco interés por las cuestiones relacionadas con nuestra cultura de defensa nacional.
Del mismo modo vemos que en la última encuesta del CIS, se sitúa a nuestras Fuerzas Armadas con un 65,1 % como mejor valorada junto con el 59,1 % que la ven muy bien preparada. Sin embargo, cuando a esos mismos españoles se les pregunta si estarían dispuestos a participar voluntariamente en la defensa de España, el 54,9 % dudan de ello. Y si a esto le unimos el poco interés y debate que les provocan las cuestiones relacionadas con nuestra cultura de defensa nacional en donde el 58,6 % manifiestan no tener interés ninguno sobre estos temas. Junto con lo que opinan sobre nuestros símbolos nacionales como son nuestra bandera e himno, el 42,9 % manifiesta no sentir emoción ninguna por nuestra bandera nacional y el 40,1 % no siente emoción ninguna cuando escucha el himno de España. Lo mismos sucede cuando ve los desfiles, juras de banderas y actos castrense, el 44,9 % no siente nada.
Y si a todos ellos les preguntamos que entienden por el concepto de lo que es la Defensa Nacional y que nos aporta nos llevaríamos de nuevo una gran sorpresa. Por eso, ¿Existe en España realmente una cultura de defensa nacional o tenemos la cultura de defensa nacional que España necesita? La reflexión seria: pues sí o pues no.
La Defensa Nacional es una cuestión de todos, no solo del ministerio de defensa. Este gestiona, promueve y solicita los recursos que necesita nuestras FAS para que sean más eficaces y más operativas. Y difunde nuestra cultura de defensa, ante nuestros ciudadanos.
Ante esta aparente contradicción de respuestas nos hace pensar que algo estamos haciendo mal, ya que vemos que EL TRABAJO y EL ESFUERZO invertido durante estos años por nuestros diferentes gobiernos a favor de la conciencia y cultura de defensa no está siendo reconocida en la sociedad. Y nuestros mismos ciudadanos no sienten la cultura de defensa nacional de forma homogénea.
Esta abismal diferencia de criterios ante conceptos tan necesarios para un país solo tiene una explicación. La política de difusión de la Cultura de Defensa de los sucesivos gobiernos de las últimas décadas, con independencia de su color político, no ha tenido la prioridad que merece a la hora de difundirla con todos los mecanismos y medios que tiene el Estado.
Muchas son las reflexiones que deberíamos realizar para poder entender los aspectos nacionales que diferencian aun país de otro. Es por eso, que el requerir otro modo de impulsar nuestra cultura de defensa, debería empezar con una reflexión integral y conjunta sobre la actual situación de nuestra cultura de defensa española antes los nuevos retos futuros, en la que se basa nuestra Política de Defensa Nacional.
La preocupación por la cultura de defensa no es exclusiva del estado Español. Prácticamente todos los países de nuestro entorno disponen de planes para fomentar y promover su cultura de defensa nacional en su sociedad, con el objetivo de propiciar un mayor conocimiento de sus valores nacionales.
Por eso, Bélgica, difunde programas de temas de seguridad y defensa a través de su televisión. Francia, disponen de acuerdos firmados con su Ministerio de Educación y de Defensa para apoyar la difusión de la cultura de seguridad y defensa en los diferentes niveles de su comunidad educativa. La defensa nacional la consideran unos de los pilares de república. Italia, tiene un programa de colaboración entre los Ministerios de Defensa y Educación, con el fin de ampliar y compartir el interés y la participación sobre los temas de la paz, de la libertad y derechos humanos. En el Reino Unido, la relación entre la sociedad y sus fuerzas armadas son excelentes. Y tienen una organización juvenil (secciones de cadetes) asociados a las FAS dentro de colegios públicos y privados. Holanda, su Ministerio de Defensa dispone de un Plan de Comunicación Corporativo cuyo objetivos son el de reforzar la marca de la defensa, trabajar en las labores de difusión de su cultura y en el reconocimiento y orgullo por las tareas de la seguridad y la defensa y de sus miembros. En sus colegios se imparte un programa específico sobre la defensa con el apoyo del Ministerio de Educación que incluye aspectos diversos, como la historia de sus fuerzas armadas. También organiza reuniones con el profesorado y que suelen ser profesores de historia.
Nuestro país España, a través de nuestra ministra de defensa, acaba de firmar un convenio con los Centros Autónomos de Enseñanza privada (Acade) para llevar la cultura de defensa a las aulas y facilitar que los profesores y alumnos conozcan la labor y los valores de las Fuerzas Armadas.
Pero también deberíamos poner en marcha otras reflexiones de mejoras para que tengamos una autentica cultura de defensa en nuestro país, según palabras de nuestra ministra Cospedal y que podrían ser:
1. Poner en marcha Proyectos Educativos, en el que se conozca las verdaderas razones de los objetivos de nuestra defensa nacional, estableciendo una hoja de ruta y un plan de trabajo que siente las bases de cara aumentar y fortalecer nuestra política de defensa como nuestra cultura nacional en la conciencia ciudadana. Ya que la defensa nacional no afecta sólo a las Fuerzas Armadas y a la organización militar. Es un concepto integrador que concierne a todos los componentes del Estado: a los ciudadanos, a la sociedad, y a los poderes públicos.
2. Tener un Proyecto Común, donde se lidere la cultura de defensa de hoy para el mañana: con los jóvenes, con la educación, con la comunicación, con la política, con los organismos que forman parte de la defensa nacional, con las industrias de defensa, etc. ("España es lo más importante").
3. Utilizar la Cultura, la TV, el Cine y la Historia de España como instrumentos necesarios para la promocionar nuestra cultura de defensa nacional.
4. Divulgar en la Sociedad nuestra Historia y Cultura Militar de España como referentes de nuestra cultura de defensa.
5. Tener un órgano especial de Cultura de Defensa, los países como EE.UU, Francia, Inglaterra y Rusia como algunos países más, tienen creado un Órgano Especial compuesto por asociaciones del ámbito de la Cultura de Defensa junto con representantes de la administración y del gobierno, con la misión de definir los temas de contenido histórico, humano y patriótico con la responsabilidad de velar para que se cumpla.
6. Crear debates sobre Cultura de Defensa Nacional, un objetivo de comunicación en el que pretende fortalecer y sensibilizar los aspectos más importantes de nuestra Cultura de Defensa Nacional, con opiniones y experiencias profesionales, convirtiendo los contenidos en temas de debate general.
En definitiva, todas estas reflexiones no ayudarían a reforzar la cultura y conciencia de seguridad y defensa en la sociedad española.
En España, actualmente, cuando algunos dudan de su país, de sus fronteras, de sus gobernantes, de sus símbolos nacionales y de la Corona de España, es más necesario que nunca explicar todo lo que significa y aporta la defensa nacional para nuestro país.
A modo de conclusión, la defensa ha de incorporarla en la sociedad como una parte más e indiferenciada y la conciencia de la cultura de defensa en nuestro país la deberíamos afrontar desde una edad temprana y continuarla en la universidad. Y nuestra clase política deberían revisar sus objetivos sobre estos temas para que de verdad sea una prioridad de estado y no un programa electoral. Por último, reclamar a los medios de comunicación un tratamiento más de estado a la hora de tratar sobre estos temas.
Es verdad que "la defensa nacional somos todos". Por eso debemos reafirmar a todos los ciudadanos los conceptos de solidaridad, patria, honor, entrega, sacrificio, nación y unidad.