(Infodefensa.com)
El astillero español Navantia ha presentado a la Marina griega una oferta para la construcción de cuatro fragatas basadas en la F-110, un buque que actualmente diseña para la Armada española. La propuesta además incluye otras dos fragatas ligeras Alfa 3000, que estarían en servicio en 34 meses desde el inicio de los trabajos, como solución transitoria, y la actualización de las cuatro fragatas de la clase Hydra, en servicio.
El programa se llevaría a cabo en Grecia a través de un acuerdo de transferencia de tecnología. Navantia se encuentra desde hace meses en conversaciones con los astilleros helenos Elefsis y Skaramagas para conocer las capacidades de cada uno y proponer una serie de mejoras para acometer los trabajos de construcción. En el caso del primero, personal de Navantia ya efectuó hace un año una inspección in situ.
La empresa española ha presentado también un plan para la formación en España de los supervisores de taller y personal de ingeniería del astillero griego elegido para el proyecto. En este proceso, Navantia aprovecharía programas en marcha como el de la F-110 en Ferrol o el de las corbetas saudíes (similares a las Alfa 3000 propuestas) en San Fernando.
La oferta de la compañía plantea incrementar de forma progresiva el grado de complejidad de los trabajos en el astillero local conforma avance la construcción de los buques. Navantia destaca que todos los trabajos previstos en Grecia se llevarán a cabo previamente en buques equivalentes en España, lo que minimiza el riesgo del montaje local y garantiza el cumplimiento de los plazos y la calidad.
La propuesta también cuenta con el apoyo del Gobierno español e incluye un acuerdo de financiación respaldado por la Agencia Española de Crédito a la Exportación. La Armada española, por su parte, contribuiría en el entrenamiento de las futuras tripulaciones en el manejo de la plataforma y los sistemas del buque.
Respecto a las F-110, la compañía afronta la recta final de la etapa de diseño e iniciará la construcción de la primera unidad a mediados de 2022 en el astillero de Ferrol. Este buque multipropósito, enfocado en la guerra antisubmarina, incorporará el sistema Aegis con un radar Spy-7, sistema de combate Scomba, sonar Captas 4, cañón 127/64 Vulcano, lanzador de misiles Mk41 VLS de 16 celdas, el misil ESSM Block 2, entre otros equipos.
De cara al programa griego, el diseño modular, explica Navantia, permite instalar, por ejemplo, una variante del Mk-41 para el mercado de exportación de 32 celdas, un sistema de defensa cercana CIWS en popa y también tiene en cuenta reservas de espacio, peso y potencia para la instalación de armas de energía dirigida en un futuro próximo.
Solución transitoria
El proyecto de las dos fragatas Alfa 3000 permitiría dar los primeros pasos en la transferencia de tecnología y facilitaría el trabajo de cara al programa de la F-110 más complejo. Se trataría de buques de unas 3.000 toneladas de peso y capacidad antiaérea, antibuque y antisubmarina.
Navantia también ofrece acelerar los plazos de entrada en servicio mediante la construcción en sus astilleros españoles, entregando la primera unidad en 24 meses en España y la segunda, diez meses después, en Grecia. Esta opción proporcionaría buques nuevos con una vida superior a los 30 años. En este caso, hay que apuntar que la Marina griega parece estar más interesada en buques de segunda mano.
Por ello, si finalmente hay acuerdo, otra posibilidad que no está descartada es un programa de modernización y actualización de algunas de las fragatas de la clase Santa María a los requisitos de la Armada helena. Por otra parte, para la modernización de la clase Hydra, Navantia apuesta por la integración de sistemas de las F-110 y la Alfa 3000 en busca de una gran comunalidad entre los diferentes buques de la flota, lo que reduciría los costes de mantenimiento.
Programa griego
Con el objetivo de reforzar sus capacidades, Grecia ha anunciado un programa de fragatas valorado en unos 5.000 millones de euros para la adquisición de cuatro nuevos buques y la renovación de cuatro fragatas de la clase Hydra en servicio.
La empresa adjudicataria también deberá proporcionar una solución transitoria -la opción preferida como apuntamos son buques de segunda mano- hasta la entrada en servicio de las nuevas fragatas. Grecia apuesta por la construcción en sus astilleros y además ha mostrado interés en un acuerdo Gobierno-Gobierno.
Navantia compite con otras seis propuestas presentadas por empresas de Estados Unidos (fragata MMSC, construida por Lockheed Martin), de Francia (fragata FDI Tipo Belharra, de Naval Group), de Países Bajos (fragata Sigma 115, de Damen), de Alemania (fragatas A200 y A300, de TKMS), de Reino Unido (fragatas Arrowhead Tipo 31, de Babcock) y de Italia (fragata Fremm, de Fincatieri).