De negar la venta de blindados Boxer a Lituania a acabar acordando la adquisición de más de 200 unidades: las informaciones sobre la postura del Gobierno alemán sobre este suministro resultan muy llamativas. Sobre todo cuando se revelaron las sospechas de que Rusia estaba detrás de la publicación en 2015, por parte del periódico alemán Die Welt am Sonntag citando fuentes oficiales,de que no existían planes para este acuerdo. Así lo afirmó entonces el Ministro de Defensa de Lituania, Jouzas Olekas, que enmarcó el asunto en “una provocación encubierta” para dar la “sensación de que algo anda mal en las relaciones entre Lituania y Alemania”, ante las tensiones que la anexión rusa de Crimea estaban generando.
Ahora, entre Rusia y sus vecinos del Báltico hay algo más que tensión, tras la invasión de Ucrania que la primera inició hace casi 15 meses. En este contexto, al acuerdo suscrito en 2016 para adquirir 88 blindados 8x8 Boxer por 386 millones, Vilna prepara sumar otras 120 unidades más, según ha revelado esta semana el Ministerio de Defensa de Lituania. De modo que la flota final superará las 200 unidades
Al mismo tiempo, la fuente oficial ha detallado que los últimos 23 vehículos de combate de infantería (VCI, o IFV por las siglas en inglés de Infantry Fighting Vehicle)del primer lote llegarán este verano. Los demás ya están operativos.
El siguiente lote previsto de 120 IFV Boxer lituanos comenzó a negociarse el año pasado, y cuenta con la participación de la Organización Conjunta para la Cooperación en Materia de Armamento (Occar), entidad intergubernamental que gestiona distintos desarrollos militares de ámbito europeo. Ahora, la agencia de adquisiciones militares lituana se encuentra a la espera de que el fabricante de los vehículos, Artec, formule su oferta comercial para continuar con las negociaciones.
Artec fue creada en 1999 conjuntamente por las compañías alemanas Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y Rheinmetall precisamente para desarrollar el programa Boxer, destinado a suministrar a los ejércitos de Alemania, que encargó más de 400 unidades, y Países Bajos, 200. Lituania fue el primer país, tras los socios iniciales, en adquirir los Boxer, con los 88 del primer lote citado.
Alemania, Países Bajos, Australia y Reino Unido
Dos años después, Australia encargó 211 unidades por 5.200 millones de dólares australianos (poco más de 3.200 millones de euros al cambio actual), dentro de su programa de modernización de las fuerzas terrestres Land 400, que incluye su construcción en el país cliente, “utilizando acero australiano y creando hasta 1.450 empleos altamente cualificados en todo el país”, como explicó la oficina del primer ministro de Australia al anunciar este contrato. Finalmente, en 2019, Reino Unido firmó la adquisición de medio millar de unidades de este vehículo por 2.800 millones de libras (cerca de 3.200 millones), mediante un contrato que el año pasado amplió con la compra de otras cien unidades más, por lo que suman más de 600 en total (acaba de comenzar su producción). Eslovenia llegó a anunciar el año pasado una compra prevista de 45 Boxer por 343 millones que finalmente, con la entrada de un nuevo Gobierno quedó sin efecto.
El Boxer es una plataforma construida modularmente para configurarse en una gran variedad de misiones. Se trata de un vehículo de alta movilidad, tanto en carreteras como fuera de ellas, y protegido contra explosiones de minas, artefactos improvisados (IED) y el uso de fuego directo. Las fuerzas terrestres lituanas lo emplean para modernizar su flota de blindados, en la que siguen empleando viejos M113.