Tal día como hoy, 17 de marzo, pero de 1808, comenzó el Motín de Aranjuez (Madrid). El levantamiento surge de la derrota en Trafalgar y una crisis económica derivada de una guerra de seis años contra el Reino Unido, bajo el reinado de Carlos IV.
Además, con el visto bueno de su valido, Manuel Godoy, Napoleón entró en España tras el tratado de Fontainebleau (1807) que le permitió entrar en el país para una supuesta invasión conjunta de Portugal.
Tras las primeras conquistas de Napoleón, como Burgos, Salamanca o Pamplona, Godoy entendió las verdaderas intenciones del ejército extranjero, por lo que sugirió a la Familia Real salir de Madrid rumbo a Sevilla para, finalmente, huir a América.
Este movimiento alertó a los ciudadanos de Aranjuez que, el 17 de marzo, se congregaron ante el Palacio Real. Una vez allí, asaltaron y tomaron el palacio de Godoy, que fue descubierto dos días después, el 19 de marzo, y tachado de traidor.
Entonces intervino el príncipe Fernando, y su padre, Carlos IV, abdica en él, comenzando su reinado como Fernando VII, que solo duraría dos meses, hasta mayo, cuando comenzó el reinado de José Bonaparte.