El programa VBC CAV 8x8 del Ejército Brasileño prevé la compra de 98 unidades de un vehículo blindado de combate, un contrato de Apoyo Logístico Inicial (SLI) y la adquisición e instalación de un sistema de simulación. El concurso tiene un claro favorito: el Centaruo II del consorcio italiano CIO, conformado por Iveco Defence Vehicles (IDV) y Leonardo en partes iguales.
Único vehículo creado específicamente para la misión de cazacarros, el Centauro II aporta el novedoso cañón de alta presión L45 de 120 mm de ánima lisa, capaz de disparar munición moderna con un rendimiento y una potencia de fuego muy superiores a los antiguos L7 A3 de 105 mm que equipan a los Leopard 1A5 y M-60 A3 TTS (y su antigua munición de otra generación).
El acceso a una variedad de munición de 120 mm en el mercado mundial, y su posible producción en Brasil, supondrá una mayor independencia y disponibilidad de este recurso durante la vida útil de la flota de blindados.
El Centauro II observado por el General Cristino, ex gerente de lo PEE Guaraní. Foto: Roberto Caiafa
La fábrica de IDV en Sete Lagoas
Además de su sistema de armas, el Centauro II cuenta con otro importante activo que le otorga la condición de favorito: la moderna fábrica de Iveco ubicada en la ciudad brasileña de Sete Lagoas (Minas Gerais) donde actualmente se produce el 6x6 Guaraní a bajo ritmo de producción (LRP) y ensambla en régimen CKD los vehículos blindados 4x4 LMV.
Además de cumplir con la cantidad solicitada de nacionalización de componentes para el programa de ensamblaje del 8x8, la fábrica de Sete Lagoas posibilita que toda la integración final de chasis/neumáticos, las pruebas de las ruedas y la logística de distribución a las unidades operativas se puede hacer replicando acciones probadas implementadas en el proyecto Guaraní, haciendo que una hipotética entrada en servicio del Centauro II sea algo fluido y bien planificado desde el inicio de la producción.
La moderna fábrica de IDV en Sete Lagoas. Foto: Roberto Caiafa
La experiencia de IDV en la configuración del vehículo deja claro que la planta de Sete Lagoas desempeñará un papel importante en la realización de este trabajo en Brasil, una experiencia que el Ejército necesitará absorber debido a las características de modernidad sin precedentes del vehículo, la torreta y el sistema de control de armamento y fuego.
Por lo tanto, la opción Centauro II, además de ser la más sofisticada tecnológicamente, es la que ofrece menos riesgo en su implementación ya que reutilizará una estructura existente.
Soldadores trabajando en el chasis de un Guaraní 6x6 en la planta de Sete Lagoas. Foto: Roberto Caiafa
Posible contrato Gobierno a Gobierno
El Centauro II también está comenzando su vida operativa en el Ejército italiano, lo que supone oportunidades de intercambio y aprendizaje con unidades operativas y escuelas de formación de tripulaciones en ese país europeo.
A finales de 2022 debería anunciarse el ganador y firmarse un contrato para la compra de dos unidades de prueba y evaluación, seguidas posteriormente por otras siete unidades que conformarán el lote de experimentación doctrinal o LED.
El IDV LMV se ensambla en la planta de Sete Lagoas. Foto: Roberto Caiafa