Argentina declara en desuso el destructor ARA Santísima Trinidad

El presidente de Argentina, Alberto Fernández, declaró ayer jueves 17 de diciembre en desuso el destructor ARA Santísima Trinidad, que dependía del Estado Mayor General de la Armada (EMGA). La decisión se tomó a través del Decreto 1017/2020.

En los fundamentos de la decisión se deja en claro que “por el grave estado de deterioro en que se encuentra, resulta imprescindible -en mérito al interés general comprometido-, declararlo en desuso y autorizar su enajenación del patrimonio del Estado Nacional conforme a las normas legales vigentes”.

Cabe destacar que a través de la resolución “confidencial” Nº 55 del EMGA del 20 de diciembre de 2004 (reclasificada como “público” el año pasado) se determinó pasar al destructor a la entonces Dirección General Del Material Naval (actual Dirección General Del Material de la Armada) para que ésta retire aquellos elementos y materiales que pudieran ser utilizables en otras unidades navales de la Armada Argentina (ARA).

En el decreto también se expresa que este proceso de enajenación del destructor se vio demorado debido a las múltiples tratativas con autoridades municipales de distintas comunas con el objeto de convertir el ARA Santísima Trinidad en buque museo. Finalmente, esta posibilidad no prosperó debido a los costos de restauración del mismo.

El buque en la actualidad “carece capacidades náuticas esenciales, como ser estanqueidad y estabilidad, por lo que se torna irrazonable continuar manteniendo a flote a la ex-Unidad Naval”. Según el decreto, la imposibilidad de continuar con la tarea de mantenerlo a flote no se limita a la derogación de dinero, sino que también contempla el esfuerzo y riesgo humano que ella supone.

El ARA Santísima Trinidad

El ARA Santísima Trinidad era un destructor misilístico de la clase Tipo 42 ensamblado en el Astillero Río Santiago (ARS) que participó de la Guerra de Malvinas. Tenía 125 metros de eslora y contaba con cinco lanzadores de misiles (Sea Dart y Exocet), tres cañones (un Vickers y dos Oerlikon) y seis tubos lanzatorpedos.

Más allá del conflicto bélico en el Atlántico Sur, el buque es recordado por haber permanecido semihundido en dos ocasiones. La primera fue en 1975, cuando fue víctima de un ataque explosivo de la agrupación terrorista Montoneros. Y la segunda ocasión fue en 2013, cuando estaba amarrado en la Base Naval Puerto Belgrano donde se encontraba para su desguace.

En la actualidad, la ARA tiene cuatro destructores en actividad: Almirante Brown, La Argentina, Sarandí, y Heroína. Este último destructor es una embarcación gemela del ARA Santísima Trinidad.