El USCGC Stone perteneciente a la Guardia Costera de los Estados Unidos (USCG) no recalará finalmente en el puerto de la ciudad argentina de Mar del Plata. Esta visita estaba prevista para este mes de febrero en el marco de la Operación Cruz del Sur, misión que ha llevado a la embarcación estadounidense a realizar operativos contra la pesca ilegal con distintos países de la región.
Esta decisión se produce después de que la Cancillería argentina rechazara la realización de un operativo conjunto entre la Prefectura Naval Argentina (PNA) y la Guardia Costera estadounidense. La Embajada de Estados Unidos en Argentina informó que el buque no visitará la parada más austral de su recorrido debido a desafíos logísticos que impiden el amarre en el puerto de Mar del Plata.
A pesar de esto, Estados Unidos continuará trabajando para fortalecer los lazos de amistad y cooperación entre la USCG y la Prefectura Naval Argentina (PNA), aseguraron desde la Embajada, ya que“la región es más segura y próspera" cuando los países se unen para fortalecer la seguridad marítima.
El buque partió el pasado 22 de diciembre desde Pascagoula, Mississippi, para un despliegue de varios meses en el Atlántico Sur donde se planteó el trabajo conjunto con fuerzas de Guyana, Brasil, Uruguay, Argentina y Portugal. Un observador de la Armada portuguesa estará a bordo del buque durante la operación. Cabe destacar que es el primer patrullaje del servicio en Sudamérica.
El USCGC Stone es de los buques guardacostas clase Legend más nuevos que posee la USCG, entregado por Huntington Ingalls Industries en noviembre pasado. El USCGC Stone tendrá como apostadero el puerto de Charleston, Carolina del Sur, donde acompañará al USCGC Hamilton y al USCGC James.
Este tipo de embarcación tiene 127 metros de eslora, 16,5 metros de manga y desplaza 4.500 toneladas con una carga completa; logra una velocidad máxima de 28 nudos, un alcance de 12.000 millas náuticas, y una resistencia de 60 días, con una tripulación de alrededor de 120 personas.
Además, cuenta con sistemas de armas automatizados, cubierta de vuelo grande, capacidades de detección y defensa frente a ataques químicos, biológicos o radiológicos, sensores y otros equipos C4ISR para aportar inteligencia a una imagen operativa común y proporcionar una mayor conciencia del dominio marítimo.