Alemania: Proyecto Ejército 2023

En el marco de los estudios de reorganización que han iniciado varios ejércitos europeos, en Alemania se ha lanzado el proyecto Ejército de Tierra 2023. Se trata de un plan al que se pretende dedicar inicialmente un total de 5.000 millones de euros a partir de 2019. De ellos, el 80% se destinará a modernización y renovación de sistemas de armas y el resto a inversiones asociadas a política de personal. El objetivo a largo plazo es disponer de tres divisiones reorganizadas y plenamente operativas entre 2027 y 2032. La capacidad operativa inicial de la primera brigada se ha fijado para 2023.

Se trata de un plan ambicioso que no viene solo. La Bundeswehr ha adquirido tres aviones de transporte C130J y tres cisternas KC130J, junto con equipamiento diverso asociado a su operatividad y apoyo en servicio. La operación ha sido aprobada por las autoridades norteamericanas por un importe total de 1.400 millones de dólares. Los aviones se destinarán al escuadrón de transporte franco-alemán de Evreux (Francia).

La cooperación con Francia es un factor importante. En el ámbito terrestre ambos países han anunciado sus intenciones de desarrollar bilateralmente un proyecto de futuro carro de combate y así se ha presentado en Eurosatory. Quizás el programa más significativo sea el del futuro avión de combate, anunciado durante la feria ILA de Berlín. En el marco del proyecto FCAS, Francia liderará el componente tripulado cuyo prototipo se espera en 2025 para que pueda entrar en servicio entre 2035 y 2040. El componente no tripulado, en donde los españoles y los italianos ya participamos, es liderado por Alemania. La cooperación bilateral se extiende a los aviones de patrulla marítima. En el ámbito naval, Alemania mira hacia otros socios de acuerdo con sus necesidades y preferencias específicas.

Este paquete de iniciativas se enmarca, en clave internacional, en el proceso de refuerzo de las capacidades militares impulsado desde OTAN y también desde las instancias comunitarias con mayor interés cada día en asuntos de defensa. En clave interna alemana, se ha vivido desde inicios de este año una preocupación creciente sobre la delicada situación operativa de las Fuerzas Armadas germanas debida, según el Ministerio de Defensa, al déficit financiero de los últimos años.

El presupuesto de defensa de 2018 en Alemania es de 38.500 millones de euros. Un incremento de 1.500 millones sobre la cifra de 2017. Para 2021 se estima que alcance los 41.000 millones una cifra un 20% inferior a lo que inicialmente solicitaba la ministra Von der Meyer. Su opinión había sido discutida desde el mismo seno del gobierno por el Ministro de Hacienda y vicecanciller Olaf Scholz del Partido Socialdemócrata (SPD), que plantea otras prioridades e insiste en que las carencias operativas se deben a problemas de estructura y gestión y no a un déficit financiero.

El debate presenta, en definitiva, la tradicional discusión sobre eficiencia o eficacia, en el marco de rivalidad política entre dos partidos que gobiernan en coalición. Es una tensión entre autoridades de Hacienda y de Defensa que no es exclusiva de los alemanes y que deberá resolverse en función de cuales sean las prioridades políticas generales. Quizás la solución sea salomónica: incrementar el presupuesto y actuar simultáneamente de forma interna para optimizar los fondos disponibles.