El Ejército despliega 15 LMV, dos RG-31 y una grúa Maxxpro en Mali
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El Ejército despliega 15 LMV, dos RG-31 y una grúa Maxxpro en Mali

Carga de vehículos en un AN-124. Foto: FLO
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El Ejército de Tierra ha desplegado recientemente 17 vehículos protegidos (LMV y RG-31), una grúa Maxxpro Recovery y un puesto de socorro en Mali para apoyar a los militares españoles que participan en el adiestramiento y asesoramiento de las tropas locales. España tomará el mando de la EUTM (European Union Training Mission) Mali el próximo 31 de enero de 2018, fecha en la que el general de brigada Enrique Millán Martínez asumirá el mandato de una de las misiones más complicada de las Fuerzas Armadas en el escenario internacional.

Será la segunda vez que un general español dirige el despliegue de adiestramiento europeo en este país africano, ya que la primera vez fue en 2014 bajo el mando del general de brigada Alfonso García-Vaquero.

A este relevo en el mando le acompañará una ampliación del contingente, hasta los 292 efectivos frente a los 140 con los que contaba hasta ahora, y un importante aumento en la dotación de material y vehículos, entre los que destaca la primera misión en tierra hostil de las recién adquiridas grúas blindadas Maxxpro Recovery, fabricadas por la compañía Navistar.El Ejército traslada una grúa Maxx Pro a Mali. FOTO: FLO

Fuentes del Estado Mayor de la Defensa (Emad) confirmaron a Infodefensa.com que se ha trasladado una de las catorce grúas blindadas adquiridas al Ejército estadounidense en 2016. Su función principal será "la recuperación de vehículos". En concreto, los MRAP (Mine-Ressistant Ambush Protected) como el RG-31 o los LMV (Vehículo Ligero Multipropósito) allí desplegados.

De hecho, las mismas fuentes apuntaron que para apoyar al incremento de personal en la zona de operaciones se ha aumentado la dotación de material y vehículos: 17 MRAP -15 LMV, un RG-31 de línea y un RG-31 ambulancia-, además de un puesto de socorro dentro de un contenedor y un camión M-250.

En total, el Ejército de Tierra ha transportado 180 toneladas de material en la zona de operaciones en cuatro vuelos de carga con aviones tipo AN-124; Hércules T-10 y T-21 del Ejército del Aire; y un vuelo en un B-737 para el personal. El Centro de Apoyo Logístico a las Operaciones (Calog-Op) del Cuartel General de la Fuerza Logística Operativa (Cgflo) ha sido el encargado de gestionar la proyección tanto del material como del personal en tierras malienses, bajo la dirección del Mando de Operaciones y del Centro de Situación del Estado Mayor del Ejército. Para dirigir sobre el terreno el trabajo de la Unidad de Apoyo a la Terminal y las Unidades de Terminal, encargadas de la entrega de material, se destacó personal de la Sección de Transporte del Cgflo en las bases aéreas y aeropuertos de Torrejón, Barajas, Getafe y Jerez de la Frontera, con la finalidad de resolver incidencias y gestionar las autorizaciones de transporte.

La Infantería de Marina se estrena en Mali

Otra de las novedades del despliegue en Mali es la participación de la Infantería de Marina que cuatro años después de su última misión internacional vuelve a desplegarse en una operación de mantenimiento de paz. Tal y como informó Infodefensa.com, los infantes partieron a principios del mes de enero hacia la zona de operaciones. Estarán integrados dentro de la Compañía de Protección a los instructores, responsable El ejérctio traslada 180 toneladas de material a la zona de operaciones. Foto:FLOde garantizar la seguridad a éstos mientras forman a los soldados en Mali. Esta compañía, bajo el mando del Ejército de Tierra español, estará compuesta por tres secciones de la Legión (Grupo de Caballero Ligero Acorazado Reyes Católicos) y dos de Infantería de Marina (Segundo Batallón de Desembarco y Tercio de Armada).

Durante los once meses de mando español se reforzará la presencia española en el Cuartel General de la misión de entrenamiento EUTM-Mali, situado en Bamako, así como la célula de apoyo a G5 Sahel, un marco institucional creado para la cooperación regional del que forman parte Burkina Faso, Chad, Mali, Mauritania y Níger. Por otro lado, en Koulikoro, a 60 kilómetros al noroeste de la capital, se sitúa el centro de entrenamiento de las Fuerzas Armadas Maliense, Education and Training Task Force (ETTF) donde, hasta la fecha, más de 8000 soldados han sido entrenados, que representan aproximadamente dos tercios del ejército maliense.

En este tercer mandato de EUTM Mali, aprobado en marzo de 2016 por el Consejo Europeo, la misión también llevará a cabo entrenamientos descentralizados a cargo de los Combined Mobile Advisory and Training Teams (Cmatt) y contará con una célula de apoyo en Bruselas para el enlace con las diferentes ramas del European External Affairs Service (EEAS) y las autoridades europeas.

EUTM Mali, una misión no ejecutiva

El estado de Malí se desmoronó en enero de 2013 ante el avance imparable de los yihadistas y muyahidines provenientes de otros países (Argelia, Libia y Mauritania, fundamentalmente) que amenazaban con tomar la capital del país. Con la puesta en marcha de la operación francesa Serval se frenó el avance hacia el sur y con ello la amenaza que se cernía sobre Bamako. Pero no solo es la seguridad de Malí lo que está en juego, también la de toda la vasta región del Sahel, una zona clave en la ruta de la inmigración y el tráfico de drogas y armamento ilegal.

A petición del gobierno maliense y sobre las bases de resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU), los estados miembros de la Unión Europea decidieron llevar a cabo una misión para la formación de las fuerzas armadas malienses, bajo el nombre de operación EUTM en Mali. Esta misión se encuadra dentro del marco de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) del bloque europeo.

El cometido de la EUTM es entrenar, asesora y educar a las Fuerzas Armadas de Malí para contribuir a la restauración de su capacidad militar, lo que les permitirá conducir las operaciones necesarias para recuperar la integridad del país y neutralizar la amenaza de los grupos terroristas. El refuerzo de la misión, cuyo coste será de 88,57 millones de euros, según señaló la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, en comisión parlamentaria confirma el compromiso de España con Mali y la lucha contra el terrorismo yihadista.



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