(Infodefensa.com)
La Fuerza Armada Nacional de Venezuela confirmó que ocho de sus efectivos fueron “capturados” por los grupos guerrilleros colombianos, durante los combates que se libran en el estado Apure, ubicado al sureste del país y fronterizo con Colombia.
El pronunciamiento se produjo, el pasado 15 de mayo, luego de que las denominadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia Ejército del Pueblo (FARC-EP) difundieran, por las redes sociales, una comunicación dirigida a la Cruz Roja Internacional, dando cuenta de los ocho militares venezolanos retenidos y solicitando la mediación de ese organismo para proceder a su entrega.
El comunicado
En un comunicado leído por el ministro del Poder Popular para la Defensa, general en jefe (Ejército) Vladimir Padrino López, acompañado por el Estado Mayor Superior de la Fuerza Armada, se hace referencia a la operación militar Escudo Bolivariano 2021 que, desde el pasado 21 de marzo, se realiza en el estado Apure, “contra grupos irregulares armados colombianos”, e indicando que “en las acciones de combate fueron capturados ocho profesionales militares, de quienes, el pasado 09 de mayo, recibimos una fe de vida”.
Atendiendo a “esta situación, denunciamos ante la comunidad internacional, ante los organismos multilaterales y las organizaciones de defensa de los derechos humanos, el infame secuestro de estos soldados, y exigimos a sus captores que ilegalmente les mantienen en cautiverio, la preservación de sus vidas e integridad física”.
Asimismo, “hemos establecido los contactos conducentes a su pronta liberación y la Cancillería de la República efectúa coordinaciones con el Comité Internacional de la Cruz Roja, para que sirva de enlace en la entrega de nuestros hermanos combatientes”.
Los militares capturados
En el comunicado oficial no se detallan los nombres, grados ni el componente militar a los que pertenecen los militares capturados. No obstante, en la comunicación de las FARC-EP, se mencionan por sus nombres y jerarquía.
En la lista del grupo terrorista figuran tres oficiales, dos supuestamente pertenecientes al Ejército, el teniente coronel Jhan Carlo Bemon y el teniente Johnny Jaguay, y uno a la Armada, el teniente de fragata Alvaro Junio Flórez. Los cinco restantes son efectivos de tropa profesional: sargento mayor de tercera José Antonio Ramos, sargento mayor de tercera Paul Hernández, sargento primero José Torrez, sargento primero Luis Coba, y sargento segundo Estiben José Aular.