El Ejército del Aire apuesta por la adquisición de un nuevo lote de aviones C295 de Airbus para modernizar su anticuada flota de aeronaves de vigilancia y patrulla marítima, formada en la actualidad por los CN235 y los P.3 Orion. El Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, general del aire Javier Salto, explicó hace unas semanas que la Fuerza Aérea está interesada en unas aeronaves C295 sin comprador que la compañía tiene en sus instalaciones de San Pablo en Sevilla.
El JEMA confirmó que existen contactos entre la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) y la empresa fabricante para alcanzar en los próximos meses un acuerdo de venta. "Airbus nos los ofrece a un buen precio y estamos detrás de comprarlos; con estos aviones en función de vigilancia marítima se resolvería el problema", detalló el general.
El Ejército del Aire tiene operativos hoy en día cuatro aviones CN235 -de una flota de ocho- para patrulla y vigilancia en las bases de Gando (Canarias), Son San Juan (Baleares), Cuatro Vientos (Madrid), que dan cobertura al territorio nacional, más un avión en la operación Sophia en Sigonella (Italia). La falta de repuestos debido al final de la producción de este modelo, unido a la obsolescencia de las plataformas, hace que la renovación sea una prioridad. "Tenemos un problema tremendo", dijo Salto.
Para reducir costes, el Ejército del Aire ha centralizado el mantenimiento de los CN235 en el Ala 37, ubicada en la base aérea de Villanubla (Valladolid), y además estudia efectuar las misiones desde estas instalaciones.
Sobre el P.3 Orion, el general destacó que habrá que pensar en su retirada, a pesar de ser "una plataforma extraordinaria" con décadas de servicio. En este caso, el Ejército del Aire opera todavía tres aeronaves modernizadas, después de dar de baja una cuarta unidad en noviembre del año pasado.
Junto con la renovación de los aviones de patrulla marítima; los programas recogidos en el nuevo ciclo inversor: MRTT, entrenador y sistema de mando aéreo; o la renovación de los cazas de combate, la Fuerza Aérea tiene otras prioridades.
Se trata de proyectos que requieren de una inversión menor, pero que son necesarios para garantizar la operatividad del Ejército del Aire. El primero es la modernización de los centros de mando y control de las bases de Zaragoza y Torrejón de Ardoz, el Grupo Norte de Mando y Control (Grunomac) y el Grupo Central de Mando y Control (Grucemac), respectivamente.
Esta actualización es consecuencia de los retrasos en la puesta en marcha del nuevo sistema de mando y control aéreo (ACSS, por sus siglás en inglés) de la OTAN, en el que participa España. "Es prioritario y fundamental", advirtió el general.
Además, el JEMA apuntó que los aviones del 45 Grupo de Fuerzas Aéreas se deben actualizar a la normativa de cielo único europeo, lo que supone una inversión considerable, y es necesaria la reparación el túnel de viento de la base aérea de Alcantarilla, con un coste de unos cuatro millones de euros. Una instalación fundamental para el entrenamiento de los paracaidistas.