Incertidumbre es una de las palabras más escuchadas si hablamos de geopolítica. La guerra en Ucrania, los conflictos en Oriente Próximo o la irrupción de China en el Pacífico agitan un tablero en el que Estados Unidos controla todavía la partida, no sin dificultades. El almirante retirado Juan Rodríguez Garat analiza en su nuevo libro Tambores de Guerra este complejo panorama geopolítico junto con las principales amenazas de España.
¿Europa realmente ha despertado con la guerra en Ucrania?
Por ahora solo las instituciones, los pueblos no. Espero que el liderazgo de las instituciones poco a poco se traslade a los pueblos. En España, por ejemplo, hay menos oposición a aumentar los presupuestos de defensa que en el pasado.
¿Rusia es hoy la mayor amenaza a la seguridad europea?
Sí, Rusia es una amenaza; en Ucrania vemos una guerra de alta intensidad donde Rusia es más débil, no puede tragarse a Ucrania sencillamente porque tiene un ejército anticuado y con armamento limitado. Rusia es más peligrosa en el terreno híbrido, y aquí empieza a hacer daño en el Sahel y en zonas más sensibles para las alianzas de las que formamos parte como las repúblicas bálticas. En este momento, la resistencia de occidente –no puede permitirse que un país conquiste a otro- ha empujado a una Rusia acorralada a formar un trío de relativos parias políticos formado Corea del Norte –Kim Jong-un-, Irán -Jomeini- y la propia Rusia de Putin. Esto es muy peligroso, porque el principal problema de esta unión de autocracias, enemigas de todos y acorraladas en el fondo de distinta manera, es que están apadrinando a grupos en distintas partes del mundo como los hutíes en el mar Rojo que, con el apoyo de Irán, y a su vez ruso y chino, están atacando a buques mercantes. Hace unos años un grupo de estas características hubiera sido rechazado por toda la comunidad internacional. Ese es el gran peligro de lo que ocurre, no es que las divisiones rusas vayan a arrasar Alemania, puesto que ni siquiera están pudiendo con Ucrania. No solo tienen capacidad de desestabilizar regiones como el Sahel, también apoyan acciones armadas similares a las que ocurren en el mar Rojo hoy en día.
¿Hacia dónde cree que camina la guerra en Ucrania?
Por el peso de las iniciativas estratégicas de los países que rodean a Ucrania, esta guerra va a durar mucho. Rusia no va a salir de Ucrania, mientras viva Putin, sin una victoria.
Esa es la gran pregunta, ¿la guerra depende de la continuidad de Putin en el poder?
Efectivamente, si Putin vuelve de Ucrania fracasado, probablemente le pasaría como a Gadafi en Libia. Putin se juega, no solo su régimen, sino también su vida. Los dictadores derribados suelen durar muy poco. Y él lo sabe mejor que nadie, porque ha intervenido en la muerte de muchas personas. Occidente no puede permitir la victoria de Putin, pero tampoco quiere la derrota porque sería arrastrar más a Rusia hacia el lado oscuro de la humanidad. Y si la Federación rusa llegara a desintegrarse en sus ochenta y pico repúblicas independientes, muchas con lazos directos con el fundamentalismo islámico, y se repartieran sus ojivas nucleares, estaríamos mucho peor de lo que estamos ahora. Occidente dará a Ucrania, en mi opinión, lo que necesite para no perder, pero no lo que necesite para ganar. Por otro lado, China e India se benefician ahora de una energía muy barata que Rusia no puede vender a Europa y vende a ellos más barata.
Acaba de mencionar a China
Para China, el país que disputará pronto el dominio global a Estados Unidos, todo son ventajas. Rusia, su rival estratégico en Asia, decae; Estados Unidos está ocupado en un terreno diferente del Pacífico, aunque trata de mantener el interés en Oriente Medio, el Este de Europa y el Pacífico, que a China le interesa para sus planes expansionista. China daría mucho porque las cosas siguieran como están y la guerra en Ucrania se prolongue indefinidamente.
¿Hacia dónde mira Estados Unidos?
Está mirando fundamentalmente en este momento a Oriente Medio, pero de reojo a China. El Pacífico es suyo hasta ahora, sin embargo, está saliendo un rival. China empieza a construir portaaviones y dentro de 20 años será un rival para la US Navy en el océano Pacífico. Pero en este momento, Estados Unidos tiene los ojos en Oriente Medio.
Si regresamos a casa, es común hablar del patio trasero, es decir, Marruecos, ¿cree usted que es la principal amenaza para España?
No, no. Marruecos es un vecino incómodo, emplea acciones de guerra híbrida para hostigar a España con el único fin de que su pueblo hable de otra cosa en lugar de los problemas que de verdad tienen. El verdadero problema de Marruecos está en la frontera con Argelia y en el Sahel y en el conflicto por el Sáhara occidental, que es probablemente el aspecto más relevante de su política exterior y la causa principal de su conflicto con Argelia. Marruecos puede hacer la vida bastante complicada a España, y lo hace de vez en cuando en las ciudades autónomas, con la manipulación de la migración para obtener concesiones, o declara en foros generalmente no oficiales que Ceuta y Melilla son marroquíes porque pertenecían al Imperio Almorávide. Lo único que no puede hacer es entrar con los carros de combate en las ciudades autónomas. Eso lo puede hacer Rusia porque tiene armas nucleares o Israel porque tiene un padrino poderoso y armas nucleares. Marruecos no tiene ni armas nucleares ni la independencia estratégica para declarar una guerra. Es decir, España tendrá que sufrir la incomodidad de Marruecos durante mucho tiempo.
Marruecos está en pleno rearme
Para hacer un análisis serio, solo hay que comprobar el material del que disponen las Fuerzas Armadas marroquíes. Si vemos sistema por sistema lo que está comprado se revela donde está su verdadero enemigo; en la frontera argelina. Marruecos no piensa en España, si pensara en España tendría submarinos. Argelia sí tiene submarinos es más peligrosa por tanto para Occidente. El submarino es el arma del débil por excelencia porque impide que una marina poderosa pueda desplegar y operar con eficacia. Si Marruecos de verdad estuviera interesado en Canarias o Ceuta y Melilla lo primero que haría es adquirir submarinos y no se compran en el mercado ni se crean submarinistas de un día para otro. El caso es que Argelia si los tiene y Marruecos lo que ha hecho es comprar fragatas antisubmarinas. Los lanzacohetes de largo alcance que ha comprado Marruecos es otro buen ejemplo; vienen muy bien para la guerra en el desierto. Leía que los lanzacohetes pueden alcanzar Granada, pero ¿el problema no era que las ciudades autónomas no estaban protegidas por la Alianza?, porque Granada sí, es parte del territorio de la OTAN. ¿Para qué puede querer Marruecos lanzar sus misiles sobre Granada y provocar una guerra con la Alianza Atlántica? Sencillamente para nada. Detrás de estos esfuerzos están los que quieren debilitar la OTAN, en España utilizan las ciudades autónomas, en Francia el concepto de la grandeur, o en Estados Unidos el argumento de que pagan la defensa de Europa.
Su libro busca despertar conciencias y poner sobre la mesa la necesidad de esa cultura de defensa de la que hemos hablado, ¿cómo convencer al que no cree?
Habría que obligar a la gente a mirar fuera de España. En una película, Beau Geste, con Gary Cooper, aparece un fuerte francés en el desierto de Argelia defendido por legionarios de los árabes. Ninguno se resistía, por supuesto, incluso los muertos los ponían en el muro. ¿Por qué no se resistían a defender el muro? Porque miraban fuera y venían lo que había. Cuando los ciudadanos españoles se resisten a este esfuerzo en defensa que necesita España para resultar disuasoria en el exterior, lo que deberían hacer es mirar fuera y leer la prensa internacional, lo que está pasando en el mundo, y los crímenes que se están cometiendo en diversas partes. Así entenderán lo que decía Vegecio hace más de 2.000 años y que sigue siendo una realidad; si quieres la paz, prepara la guerra.