El comandante general de la Fuerza Aérea del Perú, general Carlos Chávez Cateriano, ha anunciado que el proceso de selección del contratista que suministre un primer avión de alerta temprana y control aerotransportado (AEW&C) se iniciará en el período gubernamental que comienza en 2026.
En declaraciones a la prensa internacional especializada, el general Cateriano reveló que —al ser lo más urgente— la adquisición de 24 aviones caza ha sido priorizada y se realizará primero, y señaló que "los sistemas de defensa aérea y la aeronave de comando y control están para las siguientes etapas y probablemente sean asumidas por el siguiente Gobierno".
Durante su mensaje a la nación, pronunciado el 28 de julio de 2023, la presidenta Dina Boluarte informó al pueblo peruano la intención de su administración de adquirir una red de radares de vigilancia terrestre y un avión AEW&C para facilitar la detección de avionetas dedicadas al transporte de drogas ilegales en el espacio aéreo peruano.
Actualmente, Perú carece de un sistema completo de radares de vigilancia que le permita monitorear de manera no cooperativa (capacidad para detectar y rastrear aviones que no tengan transpondedores a bordo) a aviones que transitan por su espacio aéreo, situación que es aprovechada por las bandas del narcotráfico para traficar drogas ilícitas hacia otras latitudes.
Sin embargo, en agosto de 2023, los Gobiernos de Perú y Estados Unidos llegaron a un acuerdo para reiniciar el programa de interdicción de aeronaves sospechosas de participar en el tráfico de drogas ilegales. El acuerdo habilita la posibilidad de que aviones AEW&C del Servicio de Aduanas de Estados Unidos puedan nuevamente colaborar con la Fuerza Aérea del Perú en la interdicción de aeronaves en vuelos irregulares, paliando de manera temporal parte de las carencias de los institutos militares peruanos en materia de capacidades de vigilancia aérea.
Sobre las opciones en el segmento AEW&C al alcance del Ministerio de Defensa del Perú destacan el G550 CAEW producido por Israel Aerospace Industries, y el GlobalEye de Saab. Ambos sistemas con precios que extraoficialmente fluctúan entre 250 y 300 millones de dólares por unidad. Otras opciones se presentan en la forma del Praetor P600 AEW, un producto conjunto entre Israel Aerospace Industries y Embraer, y el Saab 340 AEW, producido por el fabricante sueco.
En cuanto a un sistema de defensa antiaérea, la pausa en su adquisición le brinda la oportunidad a las Fuerzas Armadas del Perú a evaluar con detenimiento los requerimientos para tal sistema de armas en el marco de nuevos teatros de operaciones militares donde abunda la presencia de drones merodeadores, baratos de adquirir y capaces de destruir sistemas de armas muy costosos.
Dadas las limitaciones presupuestales de Perú, la postergación de la compra del primer avión AEW&C es el resultado de priorizar de requerimientos. La compra de aviones caza es de carácter crítico porque carecer de tan importante activo militar en los próximos años sería riegoso.