La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha podido participar desde Albacete de la reparación de un Eurofighter desplegado en Estonia gracias a una solución de teleasistencia con realidad aumentada desarrollada por Indra. La ministra se calzó las gafas de realidad aumentada que le permitió ver lo mismo y acceder a la misma información contextual y documentación técnica sobreimpresa. Tanto la ministra como el operador en Estonia pudieron ver una microfisura en una pieza que, por seguridad, impedía que la aeronave pudiera seguir volando. La solución fue fabricar en Estonia una nueva mediante técnicas de fabricación aditiva, no suficientemente duradera para que el avión pudiera seguir operando, pero sí lo suficiente para realizar lo que se denomina un vuelo ferry, es decir, regresar a España para ser reparado.
La demostración en la que la ministra asumió el rol de especialista en una operación de mantenimiento en remoto se realizó durante las Jornadas de Demostración de la Base Aérea Conectada Sostenible e Inteligente (BACSI) que se celebraron en la Maestranza Aérea de Albacete la semana pasada.
La demostración fue un ejemplo de la tecnología de Indra para incrementar la disponibilidad operativa de las aeronaves españolas y extender su ciclo de vida. Según ha explicado la empresa, estas soluciones consiguen “replicar y digitalizar el conocimiento de los profesionales para que no se pierda y esté siempre disponible cuando se necesite”. El objetivo, aseguran, “es avanzar hacia un nuevo modelo de sostenimiento basado en datos con el que se consiga que los trabajos que se lleven a cabo en los hangares estén guiados por procedimientos definidos en el plano digital y que las acciones que se llevan a cabo en el plano físico queden a su vez fielmente reflejadas en el digital, de modo que se cuente con información completa y precisa con la que mejorar la planificación, agilizar procesos y tomar las decisiones más acertadas”.
Robles inauguró las jornadas acompañada de la secretaria de Estado de Defensa, María Amparo Valcarce, y del jefe de Estado Mayor del EA, Javier Salto Martínez-Avial. En la cumbre, empresas como Navantia, Indra e ITP Aero, compartieron espacio con pymes en un centenar de stands dispuestos en un hangar en cuyo centro se exhibe como símbolo un avión a reacción de entrenamiento Casa C-101 Aviojet, de los que ya han sido sustituidos por los nuevos Pilatus PC-21 del Ejército del Aire y del Espacio.
Indra también presentó su aporte tecnológico al proyecto, un sistema capaz de analizar mediante inteligencia artificial el Eurofighter en pleno vuelo para que nada más toque tierra envíe esos datos a los relojes o tabletas de los mecánicos que están a pie de pista y estos, una vez confirmen los datos, los sumen al diagnóstico que realicen con sus propias gafas de realidad aumentada y lo envíen todo junto al área de mantenimiento.